El presidente de Iberia pide una investigación al Gobierno

El presidente de la compañía aérea española Iberia, Manuel Prado, ha solicitado al Gobierno la apertura de una investigación para esclarecer las posibles implicaciones de la firma en la compra de 29 aviones Boeing-727, según ha podido saber EL PAIS en fuentes competentes. El señor Prado ha escrito en este sentido al ministro de Industria, señor Pérez de Bricio, y ha puesto el hecho en conocimiento del presidente del Instituto Nacional de Industria (INI), señor Jiménez Torres. El presidente de Iberia intenta, según las mencionadas fuentes, mantener la credibilidad de una serie de personas que prestan actualmente sus servicio en la compañía, cuya responsabilidad debe quedar por completo esclarecida.La Securities and Exchange Commission estadounidense está esclareciendo posibles sobornos en la venta de aviones Boeing a líneas aéreas extranjeras, desde 1967 a 1973, entre los que pudieran estar incluidos los veintinueve 727 comprados por Iberia.

La compra de tan importante partida por parte de Iberia pudo suponer unos corretajes, según los porcentajes usuales en este tipo de operaciones, de cerca de tres millones de dólares, unos 210 millones de pesetas. No obstante, fuentes de la compañía indican que en el caso de la Boeing no se devengaron comisiones, pues la compañía representante de Boeing en España no participó en la operación.

El contrato de Iberia, que hasta entonces nutría fundamentalmente su flota de aviones Douglas, supuso,un alivio para la Boeing, que estaba a punto de cerrar su cadena de montaje del 727. Con anterioridad a esta operación, Iberia había adquirido tres aviones, Boeing, tipo Jumbo, si. bien parece ser que a través de su consulting en España. No ocurrió así en el caso de los 727, según hemos dicho. Un ingeniero de la Boeing que conocía todos los extremos de la operación y controlaba la llegada de los aviones a la terminal de Iberia en Barajas, Mr. Bond, fue retirado de su tarea y abandonó España.