_
_
_
_
_

El presidente de Zaire podría abandonar el poder

Los medios políticos y económicos belgas siguen con interés la crisis de Zaire (ex Congo belga), provocada por los «gendarmes katangueños», que podría conducir a la salida del poder del presidente Mobutu.

Más información
"La lucha en Shaba es el comienzo de un levantamiento general contra Mobutu"

Las informaciones que llegan a Bruselas sobre la situación militar en Zaire son parciales y confusas. Sin embargo, todas coinciden en afirmar que el ejército de Mobutu es incapaz de hacer frente al avance de los «gendarmes katangueños», que estarían a las puertas de la estratégica localidad de Kolwezi.A nivel oficial, el Gobierno belga se muestra solidario del poder establecido en Zaire, es decir, del presidente Mobutu Sese Seko. Los belgas han enviado importantes cantidades de material militar, pero desmienten la presencia de dos compañías de soldados belgas que, junto con otras cuatro de Estados Unidos y Francia, habrían llegado el pasado 27 de marzo a Kolwezi.

Los medios de difusión, que cuentan con especialistas en temas congoleños, se hacen eco de la posibilidad de una negociación entre Mobutu y la oposición de Zaire. Hay quienes avanzan la eventualidad de una salida de Mobutu al extranjero, que concluiría con su exilio en una de las lujosas residencias que tiene en Bélgica, Francia o Suiza.

Karl I Bond, actual ministro de Asuntos Exteriores zaireño, suena como uno de los posibles sucesores de Mobutu. Tiene a favor sus lazos familiares con Moisés Tshombe, ex líder de los «gendarmes katangueños», y cuenta con amistades en la provincia de Shaba, centro actual de las operaciones militares.

Los intereses económicos belgas en su ex colonia son muy importantes. De ahí la actitud ambigua del Gobierno belga que, según algunos observadores, jugaría actualmente a dos cartas: el apoyo, reticente al general Mobutu y la observación atenta de sus posibles sucesores.

Únete a EL PAÍS para seguir toda la actualidad y leer sin límites.
Suscríbete

También los medios militares y políticos de la OTAN con sede en Bruselas observan con atención la evolución en Zaire.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_