El tema de los disidentes, excluido de las conversaciones de Moscú
Las delegaciones soviética y norteamericana, encabezadas respectivamente por el ministro de Asuntos Exteriores de la URSS, Andrei Gromiko, y el secretario de Estado norteamericano, Cyras Vance, renunciaron ayer, en su segunda ronda de conversaciones, a tratar aspectos de los derechos humanos, dedicándose exclusivamente a las negociaciones sobre limitación de armas estratégicas y otros asuntos bilaterales. Moscú y Washington han acordado crear grupos de trabajo conjuntos para estudiar problemas diplomáticos, que se reunirán en las dos capitales o en Ginebra.
En la reunión de ayer, según comentó un portavoz del Departamento de Estado, no se tocaron puntos relativos a la limitación de armamento estratégico, que habían comenzado a debatirse el lunes, en presencia del secretario general del PC soviético, Leónidas Brejnev. El mismo portavoz subrayó que las negociaciones de ayer versaron sobre la venta de armas convencionales por los dos Estados, el límite de las pruebas nucleares, las relaciones económicas bilaterales, la situación en el Próximo Oriente y en el Sur de Africa.El desvío, durante las conversaciones de ayer, del tema de la limitación de armamento nuclear se debe, en opinión de algunos miembros de la delegación norteamericana, a que los soviéticos están estudiando en estos momentos las diferentes propuestas que hizo Cyrus Vance durante las conversaciones del pasado lunes. Las propuestas parecen ofrecer buenas perspectivas, según informó el propio Vance durante el brindis en la cena ofrecida por su colega soviético, Gromiko; el secretario de Estado afirmó que se llegaría a «soluciones adecuadas».
De todas formas existen divergencias entre ambas delegaciones sobre limitación de armamento. Los soviéticos quieren permanecer dentro de lo estipulado en los acuerdos de VIadivostok, mientras Estados Unidos intenta hacer ciertas modificaciones de los acuerdos firmados por Gerald Ford y Brejnev, en el puerto siberiano, en 1974. En especial, una disminución del número de vectores (transportes) de armas nucleares de 2.400 a 1.500, así como dejar para una nueva tanda de conversaciones, SALT 3, el tema de las controvertidas armas Cruise (misil táctico -estratégico de Estados Unidos) y Backfire (bombardero exclusivamente táctico, según sus fabricantes soviéticos).
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