La CEE varía al alza sus previsiones para 1977

Los ministros de Economía y Finanzas de la CEE aprobaron una corrección de las previsiones económicas de los países del Mercado Común para 1977. Aprobadas a principios de diciembre, los nueve deben dar marcha atrás en sus proyecciones económicas. El realismo se antepone al optimismo de finales de año, y se calcula que la CEE sólo alcanzará un crecimiento del PNB del 3,5 % en 1977 (contra el 4 % inicialmente previsto). La inflación, que se esperaba limitar entre el 7 y el 8 %, podría superar, una vez más, el 10%. Tampoco se cumplirán las previsiones de desempleo que, lejos de disminuir, puede superar los seis millones en fecha próxima.

El problema fundamental de las economías de los nueve, excepto en la RF de Alemania, Holanda, que cuentan con superávit importantes de sus balanzas de pagos, reside en cómo reactivar la economía sin disparar la inflación.El Consejo de Ministros de Economía y Finanzas de la CEE analizó, en este contexto, la situación internacional. Los nueve esperan mucho de la cumbre económica occidental que, el 7 y el 8 de mayo, reunirá en Londres a los jefes de Gobierno de Estados Unidos, Canadá, Japón, RF de Alemania, Francia, Italia y Gran Bretaña.

Como paso importante, en materia de cooperación económica internacional hay que destacar que el consejo aprobó una homologación comunitaria del sistema de créditos a la exportación. La CEE practicará modalidades análogas a las de Estados Unidos y Japón, evitando roces de guerra comercial entre los tres grandes del bloque occidental, por lo menos en el sector de créditos a la exportación.

Siempre en el marco de la interrelación mundial de los problemas económicos, los nueve deciden coordinar su postura ante, la reunión, a finales de abril en Washington, del comité interino del Fondo Monetario Internacional (FMI).

Otro aspecto importante para los nueve, de cara a su reactivación económica, radica en las relaciones con los países productores de petróleo y materias primas en general. La Conferencia Económica Internacional, conocida también como «Diálogo Norte-Sur», deberá servir de base para establecer nuevas normas de intercambios comerciales y económicos entre países ricos y pobres.

Por último, los ministros trataron, sin conclusiones finales, del posible puente a establecer entre las monedas de la CEE que hoy flotan.

,El denominado Plan Duisemberg, en honor al nombre del ministro holandés de Finanzas que lo lanzó, no parece conseguir demasiados partidarios en su intento de ligar a la «serpiente monetaria» (donde están el marco alemán, franco belga-luxemburgués, florín holandés y corona danesa), las divisas que van por libre (franco francés, lira italiana y libras esterlina e irlandesa).

Denis Healey, ministro británico del Tesoro y presidente en funciones del Consejo de Economía y Finanzas de la CEE, se mostró «razonablemente optimista» en cuanto al futuro de la cooperación económica internacional, donde la CEE debe participar con «puntos de vista comunes», según anunció durante su conferencia de prensa.