Alianza de liberales y democristianos en el Sarre

El Partido Liberal Alemán se acaba de unir al democristiano en el land del Sarre. Por segunda vez en pocos meses se repite un cambio de alianzas en una región alemana en base a una estrategia para romper la debilidad de un Gobierno de minorías, en este caso, democristiano. Anteriormente, esta maniobra se llevó a cabo en Baja Sajonia, y gracias a ello accedió la Democracia Cristiana al poder en esa provincia.

A pesar de que los liberales del Sarre han tratado de quitar importancia a su determinación, a nadie se le escapa que la socialdemocracia resulta aún más debilitada en el Consejo de las Regiones (Bundesrat), segunda Cámara legislativa de la nación. Esto significará una mayor dificultad para la aprobación de reformas políticas por vía legal.Respecto de la nueva situación política del Sarre, el jefe liberal de la RFA, Genscher, ha comentado que «ahora se practicará en el Sarre una política liberal», lo cual no parece concordar con el hecho de que sus compañeros de partido desempeñarán únicamente tres carteras en el nuevo Gobierno de Saarbruecken. La socialdemocracia no ha reaccionado oficialmente respecto del paso dado en esta región, pero los grupos críticos de este partido temen que la fracción liberal vaya desmarcándose progresivamente de la socialdemocracia a nivel federal, y termine por romperse la coalición.

Para disminuir, por el momento, el peligro de que la socialdemocracia se vea obligada a pasar a la oposición, los liberales del Sarre dicen estar dispuestos ano decidir cuestiones importantes antes de las elecciones de 1979, en las que se someterá a consulta la composición de la dieta local.

Entretanto, el Gobierno federal se dispone a entregar al Parlamento un proyecto de ley por el que se reformaría el derecho de asilo. En el plan se prevé la expulsión de todo extranjero que «abuse» de ese derecho. Si el proyecto legal adquiere carácter de ley tal y como se va a enviar a la Cámara legislativa, la medida se aplicará en casos en los que incluso el afectado esté pendiente de proceso o alegue temer la represión policial en el país de origen si se le entrega a ellas. Esta puntualización parece referirse de un modo especial a casos de terrorismo, en los que los autores sean fugitivos de las naciones socialistas que se incorporen, una vez en Occidente, en agrupaciones parafascistas.