Piden protección para los palacios de la Castellana y de Recoletos

La comisión promotora de la Asociación para la Defensa del Patrimonio acaba de solicitar la apertura de expedientes de declaración monumental para todos y cada uno de los palacios y edificios característicos que permanecen en pie, todavía, sobre el paseo de la Castellana, el de Recoletos y zonas de influencia.

En la misma solicitud se exige la cancelación de la extensión de licencias de derribo de estas edificaciones, con el fin de salvar de la piqueta aquellas construcciones singulares que en este eje madrileño se ven seriamente amenazadas.En el texto se justifica la petición de declaración monumental con argumentos relativos al deterioro artístico que el patrimonio madrileño sufre en esta zona desde los años sesenta. Hasta entonces, este surco axial de la ciudad mantenía una evidente coherencia y armonías arquitectónicas, caracterizado por su belleza y la proporcionalidad de su trazado. Sin embargo, la irrupción de la especulación y el ropaje de permisión con el que las autoridades municipales transigieron a este fenómeno, causaron la desaparición de palacios como los de Medinaceli, Larlos y Montellano, además del que perteneció al conde de Romanones entre Castellana y Serrano y el que se erguía en el cruce de esta calle y la de Ortega y Gasset, entre otros muchos.

Sobre los solares que ocuparon, en su dia estos edificios singulares se yerguen hoy edificios incluso de veinte plantas, cuya presencia privó de personalidad una zona tan peculiarmente armónica y madrileña.

Por todo ello, los redactores de la solicitud instan a la Dirección General del Patrimonio Artístico y Cultural para que agilice la incoación de la declaración de casco histórico de Madrid, al objeto de atajar la cadena de demoliciones que se cierne sobre esta Y otras zonas específicamente dotadas de edificaciones con valor artístico.

Unicamente en esta franja de la Castellana se encontraban muy próximos a su desaparición las construcciones que se levantan sobre los números nueve, once, quince y cincuenta del paseo y la declaración monumental del hasta ahora palacio de Presidencla de Gobierno, sobre el número tres de la avenida, lo ha salvado de entrar en la ristra de casa amenazadas por la especulación.

Recientemente ha comenzado el cerco y demolición del palacio que durante muchos años albergó la legación diplomática húngara, edificio como los otros perteneciente al denominado estilo ecléctico de finales del pasado siglo, contemporáneo del neobarroco.