Conmoción en Murcia por el robo en el museo de la catedral
A unos trescientos millones de pesetas se calcula extraoficialmente que asciende el valor de los objetos robados, al parecer durante la madrugada de ayer, en el museo de la catedral de Murcia. Entre los objetos sustraídos se encuentra la corona de la Virgen de la Fuensanta, de oro y piedras preciosas, otra corona de la imagen del Niño Jesús, así como un anillo y una cruz pectoral que pertenecieron al cardenal Belluga. Todos los indicios parecen corroborar la hipótesis de que la acción ha sido efectuada con una gran preparación y que no ha sido obra de aficionados, ya que los ladrones no se han llevado todo el tesoro, sino parte de él, centrando su interés, al parecer, en las piedras preciosas.Si bien en un principio circuló la versión de que los autores habían permanecido durante toda la noche en el museo, marchándose por la mañana, las primeras investigaciones policiales arrojaron la conclusión de que se habían introducido ya por la noche, a una hora todavía indeterminada, utilizando uno de los accesos laterales de la iglesia, conocido como la puerta del Pozo. En cuanto a la entrada del museo, en el interior del recinto aparecía con deterioros tanto en los cristales como en los barrotes.
El hecho ha provocado una gran conmoción entre los murcianos, recibiéndose durante el día de ayer numerosas llamadas telefónicas en la catedral para pedir información sobre el robo. Hubo también desde el primer momento una gran movilización de la policía, trasladándose incluso a Murcia el jefe superior de policía de Valencia, quien llegó a la ciudad sobre las seis de la tarde. Por otra parte, el conocimiento del edificio que revela la forma en que el robo ha sido perpetrado ha hecho suponer que podría tener alguna relación con las obras de restauración que se están llevando a cabo en la capital murciana.
