Tres millones de kilos de patatas, a punto de pudrirse en Canarias

Tres millones de kilos de patatas pueden pudrirse si en el plazo de una o dos semanas no son comercializadas por la Comisaría de Abastecimientos y Transportes. A mediados de año, el gobernador civil de Tenerife sugirió a los agricultores almacenar patatas para hacer frente a los períodos de escasez, y en toda la zona que va desde Santa Ursula a Icod, pasando por lo alto de la Orotava y la Guancha, los agricultores siguieron este consejo. La escasez y los altos precios alcanzados en determinadas épocas del año determinaron seguramente que el gobernador recomendara el almacenamiento, pero ahora resulta que las patatas guardadas no tienen salida.La situación ha provocado reacciones, y los campesinos han comenzado ya a tener sus reuniones para discutir el tema. El foco inicial de estas reuniones fue la Guancha, y posteriormente se fueron extendiendo hasta el punto de que ahora son muy frecuentes las reuniones y asambleas en las que trasciende el tema concreto de las patatas almacenadas para irse a planteamientos más generales acerca de la situación agrícola.

Los campesinos quieren que la CAT suspenda las importaciones de patatas -se están trayendo de Venezuela e Inglaterra- y absorba esos tres millones de kilos para comercializarlos en el archipiélago. Pero la impresión es que la Comisaría no tiene capacidad para absorberlos, y los campesinos han advertido que, en caso de no solucionarse el problema, van a aprovechar la fecha del 15 de diciembre la del referéndum- para arrojar las patatas sobre las carreteras y autopistas de las islas. También tienen la intención de ir por los pueblos vendiéndolas a 19 ó 20 pesetas el kilo.