España no recibe fosfatos de Bu-Craa

A los siete meses de que el 65 % de la empresa Fosfatos de Bu-Craa pasase a control marroquí, y a pesar de que las fuentes oficiales aseguraron en su momento la continuidad en el suministro de fosfatos, desde hace varios meses España no recibe ningún envío de esta materia prima, lo que está creando una grave situación para el sector de fertilizantes fosfatados, que a su vez repercute gravemente en el sector agrario, según han informado a EL PAIS fuentes oficiales.La situación creada obliga a España a importar fosfatos de Marruecos y estar sujeta a las oscilaciones de precios del mayor productor mundial.

El Gobierno hace dos meses aprobó un aumento del precio de los fertilizantes para los agricultores y unas subvenciones que completaran la parte de costes no cubierta con el aumento de precios. A pesar de esta solución forzada, la situación producida por el corte de suministros de Bu-Craa está motivando que el subsector de fertilizantes fosfatados pase por una situación delicada.

En los últimos meses, las relaciones hispano-marroquíes han experimentado ciertas fricciones, principalmente motivadas por los reiterados apresamientos de buques que faenan en los caladeros del Norte de África.

Fuentes del sector de armadores pesqueros, han puesto de relieve su predisposición a atracar sus buques en tanto en cuanto el Gobierno no tome las medidas necesarias para defender la flota pesquera española, si bien reconocen que en alguna ocasión estos apresamientos están justificados por irregularidades en materia pesquera.

Hace escasos días, el procurador en Cortes representante de los empresarios del sector, señalaba que al Gobierno le estaba faltando una punta de decisión, ya que mientras los británicos habían puesto su flota naval en las aguas del mar del Norte para defender sus intereses bacaladeros frente a Islandia, España no había casi ni protestado por vía diplomática.

Sorprende incluso más, el hecho de desconocer las ventajas del Tratado de Madrid, mediante el cual España entregó el Sahara a Marruecos y Mauritania sin, al parecer, ninguna contrapartida. Las mismas fuentes consultadas informan que lo que causa mayor indignación entre los industriales de la pesca son las entregas de armamento español.