Herminia Braunsteiner Ryan,
de 57 años, hasta ahora una ama de casa normal, en Nueva York, ha sido acusada -y se está celebrando juicio, en Dusseldorf-de haber participado en las matanzas judías de los campos de concentración nazis. Al parecer, la señora Braunsteiner es una de las nueve mujeres guardianes, que con cuatro hombres, controlaban el campo de Lublin. Se calcula que murieron durante el tiempo de concentración del orden de 250.000 judíos.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.