José Luis Velasco,
ciudadano español que, desde el pasado 25 de agosto, permanecía encaramado en los tejados de la cárcel de Poggioreale, en Nápoles, como protesta contra un posible orden de extradición a España, ha puesto fin a su actitud al disponer su libertad el Tribunal de apelación de Florencia. Velasco, cuya extradición, según informa el mismo, tiene solicitada el Gobierno español como presunto implicado en el atentado que costó la vida al almirante Carrero Blanco, logró huir a Suiza. Pasó luego a Italia donde fue condenado por delitos comunes. Esta pena la cumpliría el próximo mes de noviembre. Sus condiciones de salud son muy precarias en razón del largo período en que ha vivido a la intemperie. Para evitar la extradición que pesa sobre él, ha solicitado asilo político del Ministerio de Justicia italiano.
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