Contaminación intencionada

En la página 13 del diario que Vd. dirige, de fecha 7 de agosto, aparece la escueta noticia y la más escueta declaración de la Delegación le Saneamiento municipal sobre las tremendas nubes de humo negro, pestilente, denso de materias suspensión en las que tengo muestras recogidas de los techos de los coches aparcados) que a partir de las 2.30 de la madrugada hasta las 12 horas del día 6 actual se produjeron intencionadamente en un basurero de los muchos que disfruta la capital.Durante esa noche una ingente población estuvo sometida, indefensamente, a la tortura de tener que respirar un aire de esas características, teniendo que cerrar puertas y ventanas en una de las noches más calurosas de este verano.

Pasa a la pagina 7.

Viene de la página 6.

A las 11 de la mañana de ese mismo día ese ambiente se masticaba en la misma calle de Alcalá.

Por si esa noticia fuera poco, durante la noche del día 6 a hoy nuevas quemas de basuras se originan a partir de las 22 horas del día 6 a la altura del mismo lugar de la anterior noche y en las proximidades o en el mismo vertedero municipal de los Toriles, como si se tratase de una vendetta por el hecho ya denunciado.

A la derecha de la noticia de la página 13 un gráfico esperanzador, como se dice ahora, y gratuíto establece la contaminacion previsible de un Madrid que limita por el Sur hasta la plaza de Legazpi solamente.

Ese gráfico denota la carencia de información. conocimiento y dimensión del problema y, por supuesto, establece el concepto discriminatorio entre el Madrid de relumbrón (el de los 340 millones de pesetas para la, protección del Museo del Prado) y el otro, el de las enormes poblaciones humanas del Sur hacinadas promiscuamente entre fábricas en constante crecimiento, y vertederos.

Sin embargo en este momento preciso resulta interesante y lo es sistemáticamente a través de muchos años) comprobar que en un período en que la circulación rodada disminuye brutalmente, en que no existe la acción de las calefacciones y en el que la industria, esa encantadora industria de Villaverde, se halla de vacaciones, Madrid amanece envuelta en humos malolientes. que muchos imbéciles atribuyen a la inversión térmica, no se sabe si por interés o desconocimiento.

La actividad incendiaria en los cada día más numerosos vertederos del sur se incrementa y ya no caben las justificaciones clásicas (como han sido que las quemas las organizaban los gitanos y la socorrida de la incidencia de los rayos solares sobre los cristales) para explicarlas, dado que estos incendios no se producen, ni uno sólo, durante el día, sino en las primeras horas de la madrugada, cuando el vecindario duerme confiadamente y los medios de difusión descansan o no pueden desplazarse a comprobarlo.

Tiempo va siendo de que las Nóminas e Inversiones de la Lucha contra la contaminación aporte resultados prácticos y de que un amplio informe ponga el dedo sobre esa llaga virulenta que en Madrid no sólo no se corrige, sino que aumenta, y para la que no son válidas ni las palabras ni los buenos propósitos.