Indicios de distension entre Indonesia y China Popular
La cordial recepción tributada en Pekín al primer ministro de Singapur, Lee Kuang-Yee, causó una fuerte impresión en Indonesia y dio un nuevo impulso a los sectores que abogan por una normalización de las relaciones diplomáticas con la República Popular China.Mientras que los organismos oficiales indonesios se mantienen en la más completa reserva, los comentarios de la prensa hacen gala de prudencia y moderación, y son menos negativos hacia China que antes. Se señala con mucho interés, por ejemplo, un discurso del primer ministro chino, Hua Kuo-feng, en el que se pronunció contra la subversión y la intervención en los asuntos internos de otros países.
Este discurso se interpreta en Yakarta como especialmente dirigido a Indonesia, pues siempre se han temido en este país dichas injerencias, que han impedido el restablecimiento de las relaciones diplomáticas entre Pekín y Yakarta.
También han llamado la atención en Indonesia las palabras del jefe del Gobierno chino sobrela política de la ASEAN (Unión de Naciones del Sudeste Asiático) y sobre la creación de una «zona de paz» en el sur de Asia.
Nunca hasta ahora fueron tan claras estas manifestaciones de buena voluntad por parte del régimen chino, máxime teniendo en cuenta que han sido expresadas por una de las más altas autoridades de Pekín. La incógnita aquí se centra en cómo reaccionará Moscú ante esta inoderada política de su rival comunista.
Por otra parte, en los últimos meses ha podido apreciarse también una actitud un poco más amistosa de Hanoi hacia los países integrados en la ASEAN. Se subraya especialmente el discurso del presidente Pham Van-dong, el primero de mayo pasado, en Hanoi.
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