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Junior se consuela con el título del fútbol colombiano

El equipo de Barranquilla, que perdió a mitad de semana la final de la Copa Suramericana, supera al Independiente Medellín

S. Torrado
Yony González, del Junior de Barranquilla, celebra su gol en la final del fútbol colombiano.
Yony González, del Junior de Barranquilla, celebra su gol en la final del fútbol colombiano.JOAQUIN SARMIENTO (AFP)
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Luego de caer a mitad de semana en la final de la Copa Suramericana, el Atlético Junior encontró muy pronto un motivo para consolarse. En un partido abierto en el que logró resistir el acecho de un rival herido, el conjunto del entrenador colombo-uruguayo Julio Comesaña levantó este domingo como visitante su octavo título en el fútbol colombiano. Su adversario, el Deportivo Independiente Medellín, no pudo coronar una improbable remontada frente a su público. El popular club antioqueño, apodado el “poderoso de la montaña”, mantuvo su invicto del semestre en el estadio Atanasio Girardot y se impuso 3-1 en el partido de vuelta, un resultado insuficiente para revertir la pesada losa de la goleada 4-1 que sufrió hace una semana en la calurosa Barranquilla.

Resguardado en el arco por el veterano portero uruguayo Sebastián Viera, su capitán, Junior recurrió a lo largo de la campaña a un vistoso juego de posesión con sus armas ofensivas favoritas, el centrocampista Jarlan Barrera, el escurridizo extremo Luis Díaz y, sobre todo, el delantero Teófilo Gutiérrez, el repatriado ídolo de la hinchada barranquillera.

La primera mitad del partido transcurrió sin mayor suspenso, pero cuando los equipos estaban a punto de irse al descanso el delantero Leonardo Castro le imprimió dramatismo a la llave al abrir el marcador con un potente remate desde el balcón del área que se coló en la esquina de la portería custodiada por Viera. En la segunda mitad, Castro conquistó su doblete al aprovechar un rebote dentro del área de un Junior que lucía fundido físicamente. Sin embargo, a veinte minutos del final el mediocampista Yony González, que salió desde el banco, trajo la calma para el equipo tiburón con un remate rasante desde el borde del área. Los minutos finales llegaron con suspenso tras el tercer gol del poderoso, otro rebote en el área visitante que aprovechó el argentino Germán Cano, goleador del campeonato con 20 goles.

Consolidado como el gran equipo del Caribe, Junior le ha apuntado a la esquiva gloria continental, pero por segundo año consecutivo se ahogó en la orilla. El miércoles, el equipo tiburón perdió en Curitiba la final de la Copa Suramericana al caer en la definición de tiros del punto penal ante el Atlético Paranaense. Los lanzamientos desde los 12 pasos se convirtieron en su pesadilla. A lo largo de los juegos de ida y vuelta, que se sellaron con sendos empates a un gol, Junior desperdició dos penaltis, uno en Barranquilla que el defensa Rafael Pérez estrelló en el travesaño y otro en el alargue de la final en Brasil, cuando Jarlan Barrera envió por los aires lo que hubiera supuesto para todos los efectos un gol de oro. Junior, que fue semifinalista de la Libertadores en 1994 con un equipo de ensueño encabezado por Carlos El Pibe Valderrama y de la Suramericana el año pasado, en ambos casos bajo las órdenes de Comesaña, nunca había disputado una final continental.

Junior había ganado su última liga colombiana en 2011. El tiburón, hambriento de títulos, reforzó decididamente su nómina en 2017, cuando repatrió a los internacionales Yimmi Chará y Teófilo Gutiérrez, el hijo pródigo del popular barrio de La chinita. Con esa temible dupla, apodada ChaTeo, cayó tanto en el torneo local como en las semifinales de la Suramericana, y se tuvo que conformar con el título menor de la Copa Colombia. Chará partió este año al Atlético Mineiro de Brasil y Teófilo - elegido por el diario El País de Uruguay como el mejor jugador de América en 2014, cuando ganó la Suramericana con River Plate de Argentina- se quedó como la gran referencia del equipo, pendiente de cumplir su promesa de dar una vuelta olímpica con su gente. Este domingo la cumplió en Medellín. "Fuimos mejores de principio a fin", dijo Teo, quien a sus 33 años se coronó campeón por primera vez en Colombia. Postergada la gloria continental, Barranquilla puede anticipar su famoso carnaval.

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Sobre la firma

S. Torrado
Corresponsal de EL PAÍS en Colombia, donde cubre temas de política, posconflicto y la migración venezolana en la región. Periodista de la Universidad Javeriana y becario del Programa Balboa, ha trabajado con AP y AFP. Ha cubierto eventos y elecciones sobre el terreno en México, Brasil, Venezuela, Ecuador y Haití, así como el Mundial de Fútbol 2014.

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