La Fiscalía evalúa si acusa nuevamente a Alec Baldwin por la muerte de Halyna Hutchins
Un nuevo análisis del arma que mató a la directora de fotografía de ‘Rust’ indica que el gatillo tuvo que ser accionado
Nuevo giro de tuerca en el caso Rust. El actor Alec Baldwin vuelve a estar en la mira de los fiscales que investigan la muerte accidental de la fotógrafa Halyna Hutchins en el rodaje del wéstern, ocurrida en octubre de 2021. En abril, los investigadores retiraron los cargos en contra del productor y protagonista, quien sostenía un revólver en la mano en el momento que una bala hirió al director y acabó con la vida de la cineasta. Un nuevo análisis de la pistola indica, a pesar de lo que sostiene Baldwin, que esta debió de haber sido accionada para disparar el proyectil.
Los fiscales han recibido un nuevo examen del arma realizado por peritos forenses y expertos balísticos de Arizona y Nuevo México. Estos tuvieron que recurrir a repuestos para reconstruir la pistola utilizada por Baldwin, que quedó inservible después del análisis hecho por el FBI. Las nuevas pruebas se han centrado en las marcas que el mecanismo del arma ha dejado en un casquillo percutido.
“Aunque Alec Baldwin niega repetidamente haber apretado el gatillo, debido a los análisis y hallazgos observados en este informe, [se concluye] que el gatillo tuvo que jalarse o apretarse lo suficiente para liberar el revólver, que estaba completamente amartillado”, escribe el análisis en manos de la Fiscalía.
Los peritos del FBI habían llegado a la misma conclusión en agosto de 2022, cuando la agencia de investigación federal dio a conocer su opinión en un caso que conmocionó a Hollywood. Las versiones de los forenses contradicen las palabras de Baldwin, quien ha asegurado desde el principio que no apretó el gatillo del arma tipo Colt 45. En entrevistas con la prensa y en su declaración judicial se ha limitado a afirmar que él solo manipuló el martillo del revólver.
El segundo análisis del arma homicida eleva el pulso que mantienen desde hace meses la Fiscalía de Nuevo México y la defensa de Baldwin, que ha luchado ferozmente para evitar que su cliente sea acusado por la muerte de Hutchins.
En abril, los fiscales del caso informaron que retiraban la acusación de homicidio accidental que enfrentaba Baldwin. La Fiscalía consideró entonces que sería difícil ganar el caso en un tribunal después de conocer que el revólver, una réplica hecha por una compañía italiana, había sido modificado antes del rodaje. Esto pudo haber ocasionado un funcionamiento defectuoso durante la escena que Baldwin ensayó cuando la pistola se disparó.
Kari Morrissey, la fiscal especial del caso, nombrada en marzo, no ha dejado claro qué hará con los nuevos hallazgos. Sin embargo, no ha descartado que el nuevo informe pueda devolver la acusación en contra de Baldwin. La acusación se fijó a principios de junio un periodo de dos meses para decidir si presentan nuevos cargos.
La muerte de Halyna Hutchins está por cumplir dos años. En este periodo, ni las autoridades ni la producción ha podido resolver el gran misterio del caso: ¿cómo pudieron llegar balas de verdad al plató del rodaje? Hannah Gutierrez-Reed, la encargada de la armería de la producción, también enfrenta cargos por omisiones en el rodaje. Se ha declarado no culpable y su juicio comenzará en diciembre.
Jason Bowles, un abogado de Gutierrez-Reed, ha asegurado que el nuevo informe supone que el revólver no fue modificado, lo que restaría veracidad a la versión de que la pistola se disparó por error y que, en cambio, tuvo que ser accionada. Pruebas realizadas por el FBI en agosto pasado revelaron que la única forma en que se accionó la pistola sin jalar el martillo, que no estaba amartillada, fue después de darle un duro golpe. Este fue el que rompió la Colt.
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