Libertad provisional para el bailaor Rafael Amargo con la prohibición de salir de España
La jueza dicta que el artista comparezca quincenalmente en un juzgado de Madrid tras su detención en Alicante por tráfico de drogas y atentado contra agente de la autoridad
La titular del Juzgado de Instrucción número 2 de Alicante, en funciones de guardia, ha decretado este sábado la libertad provisional del bailaor granadino Rafael Amargo, tras ser detenido la noche del jueves al llegar desde Madrid a la estación de tren de Alicante por la presunta comisión de un delito de tráfico de drogas y atentado a la autoridad, en el momento de su detención. El caso parte de una denuncia de sus vecinos en Madrid por presunta venta de droga en su piso del centro de la capital.
Amargo, de 48 años, está investigado por un delito contra la salud pública, otro de atentado contra la autoridad y dos de lesiones, ha informado el Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana. Estos dos últimos presuntamente cometidos durante su detención del jueves. La magistrada le ha impuesto como medidas cautelares la obligación de comparecer los días 1 y 15 de cada mes ante el Juzgado de Instrucción número 27 de Madrid, que es el competente en esta investigación, así como la prohibición de salida del país.
Sin embargo, la jueza ha denegado la prisión provisional eludible con fianza de 6.000 euros, que solicitaba para el detenido el Ministerio Fiscal porque entiende que “no concurre un riesgo tan alto de fuga” y existen “otras alternativas”, como las que ha establecido. La magistrada justifica su decisión en que el investigado “tiene ya retirado el pasaporte” por otro juzgado de instrucción de Madrid y “tiene arraigo en España, donde es un personaje público, lo que hace difícil que pueda eludir la acción de la justicia”.
Dificultades económicas
Amargo ha declarado a la juez que tiene dificultades económicas y que viaja una vez por semana a Alicante para actuar en un local a cambio de 200 euros. El bailaor se ha declarado inocente, asegurando que no se dedica a la venta de droga, sino que su relación con los estupefacientes es únicamente para consumo propio. Asimismo, ha señalado que está bajo tratamiento por enfermedad, que vive con sus padres, a los que los cuida, y que cuando comenzó la investigación policial le bloquearon las cuentas bancarias, con las consiguientes dificultades económicas que provocaron que tuviera que vender su vivienda.
La de Alicante ha sido la segunda detención del artista por hechos similares, ya que en diciembre de 2020 la policía le atribuyó un delito contra la salud pública por el que la Fiscalía solicita nueve años de prisión. El juicio está previsto que se celebre en Madrid en junio. Pese a esta investigación, los vecinos de Amargo han vuelto a denunciar la situación con un continuo tránsito de personas por su piso, que llegaban a “dormir en el descansillo de los pisos superiores”. En el portal de la finca era habitual encontrar jeringuillas.
Babelia
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