Raquel Guerrero, actriz de ‘Machos alfa’: “Los hombres también son víctimas graves del patriarcado”
Después de toda una vida trabajando en el teatro, la intérprete alcanza el éxito popular gracias a su personaje en la serie de Netflix
El día de la entrevista con Raquel Guerrero (Madrid, 44 años) en el Café Barbieri, legendario lugar de encuentro de artistas en el barrio madrileño de Lavapiés, la actriz está emocionada por dos motivos: Netflix acaba de anunciar que habrá segunda temporada de la serie Machos alfa, el fenómeno de audiencia que le ha dado fama nacional; pero sobre todo, porque al día siguiente se va a una feria audiovisual en Clermont-Ferrand (Francia) para buscar financiación para la película que ha escrito y quiere dirigir, Zoe, la historia de una mujer que pasa por una terapia de desintoxicación. Aunque ama el cine social (“últimamente me ha fascinado Aftersun”), ha sido la comedia española de los hermanos Caballero la que le ha dado el personaje de su vida.
Pregunta. ¿Se parece en algo a esa mujer infiel que interpreta?
Respuesta. Aunque tengo más filtros que ella, puedo ser muy directa, sin pelos en la lengua. Luego también tengo esa parte tierna, de tener sentimiento de culpa y comerme la cabeza en un caso de cuernos como el suyo…
P. ¿Y en qué no se parece?
R. En la relación con Daniela, la influencer a la que interpreta María Hervás, de competencia absurda y machista con otra mujer por el hecho ser más guapa y más delgada, que expresa el sistema en el que estamos. Yo sí tengo sororidad.
P. En las relaciones, ¿es partidaria de la infidelidad a la chita callando, como hace su personaje, o más de abrir la pareja, como hace el de Kira Miró?
R. El otro día María [Hervás] habló del colapso de la monogamia y creo que tiene razón. Nos han educado en que tenemos que tener pareja y que además la pareja es de una manera y no puede ser de otra. Entonces eso crea mucho conflicto porque en realidad no es así: la pareja es como la familia. Pueden existir muchos modelos. Y yo quiero conocer otros modelos.
P. ¿Ha tenido pareja abierta?
R. No la he tenido y no sé si podría, pero lo que podría aceptar es que cualquiera puede tener un desliz.
P. ¿Cómo se dio cuenta de que Machos alfa se había convertido en un fenómeno y usted de pronto era famosa?
R. Pues me di cuenta cuando Pablo Alborán se quiso hacer una foto conmigo. Me hizo una ilusión enorme, aunque lo más bonito es que muchísimos compañeros de la profesión que me conocen y que saben que llevo años sacando mis proyectos, con iniciativa, luchando, se alegran por mí de una forma muy sincera. Hay gente que me dice: “¡Qué descubrimiento! ¡No te conocía!”. Y yo pienso, claro que no me conocías, porque no había tenido una oportunidad así. El personaje es un caramelo.
P. Si en la vida real su ex se pusiese a seguir a su nuevo amante como ocurre en la serie, ¿se le encenderían las alarmas de violencia de género?
R. Desde luego, en la vida real me echaría a temblar. Lo que pasa en este caso es que la serie simplemente plantea situaciones dentro de la comedia.
P. Alguna gente ha criticado la serie diciendo que es el summum del “ni machismo ni feminismo”. ¿Diría que es verdad?
R. Los creadores no han querido posicionarse, sino simplemente hablar de un tema que era muy necesario y que afortunadamente ha recibido el apoyo de una plataforma. Cómo el patriarcado afecta a las mujeres pero también a hombres. La serie, a través del humor, genera debates que son muy serios. Abre melones de todo tipo: desde los micromachismos hasta el techo de cristal.
P. ¿Y por qué los protagonistas son ellos?
R. Para que se vea el patetismo de esas personas a través del humor. En un mundo en el que las mujeres han tomado una nueva posición, ¿qué ocurre? Que los hombres están muy perdidos. Pero ojo, las mujeres también.
P. ¿Usted está perdida?
R. Yo siempre me he sentido una tía muy libre y durante mucho tiempo la respuesta ha sido que eso no se podía hacer. A nivel sexual, a nivel laboral, siempre he querido ser un chico porque no tenía referentes femeninos que tuvieran el tipo de iniciativa que yo tenía.
P. ¿Se refiere a su faceta de guionista y directora?
R. En esta faceta ha sido más al contrario: siempre he encontrado las puertas abiertas, pero es verdad que discuto mucho con muchos amigos míos de la profesión por las medidas de paridad y porque ahora mismo haya un porcentaje de puntos para recibir ayudas que se da a las mujeres. Yo les intento hacer entender que es una cuestión que es necesaria, aunque pueda producir desequilibrios.
P. ¿Se ha encontrado machos alfa entre sus compañeros?
R. Pues claro, como todas. Es de lo que habla la serie: de que las mujeres hemos dado un golpe en la mesa que ha servido para remover conciencias, que los hombres despierten y se den cuenta. Tengo muchísimos amigos que simplemente no se dan cuenta. Y a ellos les digo que también son víctimas graves del sistema patriarcal.
Babelia
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