¿Qué he hecho yo para merecer esto?
Este drama noruego trata de forma tediosamente reiterativa de ese maldito depredador llamado cáncer. Empiezo y acabo harto y horrorizado de tumores

Se supone que ir en estos tiempos al cine (en cualquier tiempo) implica la búsqueda de placer, ensoñación, aventura, sentimiento, evasión, droga, suspense, risa, sensaciones potentes, esas cosas. Y que en época de peste, confinamiento, venganza de la nieve, miedo, estados de ánimo al límite, posee un valor incalculable lo de sentirte bien durante un rato, olvidarte provisionalmente del estado de las cosas. Dócil de carácter y cumplidor de mis obligaciones (es mentira, pero me gusta imaginarme así) veo las películas que me indican y voy donde me mandan. Pero me planteo la definitiva jubilación ...
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