Gregorio Marañón presidirá la fundación Ortega-Marañón
El académico, nieto del famoso médico humanista, sustituye en el cargo a Juan Miguel Villar Mir
Gregorio Marañón y Bertrán de Lis fue elegido este lunes por unanimidad presidente de la Fundación José Ortega y Gasset-Gregorio Marañón, en sustitución del empresario Juan Manuel Villar Mir. El nuevo responsable de la misma centrará su labor en un proyecto que aúne lazos académicos y culturales y promueva el diálogo y el debate en una clave de consenso, “muy parecida a la que definió el espíritu de la Transición”, aseguró tras ser elegido.
Casi una década –desde 2010- llevan unidos los nombres de ambas figuras históricas en un empeño común. Pero ya antes, durante sus vidas, se destacaron juntos en muchos ámbitos. La posteridad los reconoce como dos referentes liberales de la historia del siglo XX. Unir las dos fundaciones dedicadas a proyectar su espíritu y su legado tiene, por tanto, mucha coherencia.
Con un presupuesto de unos 6 millones de euros, la institución con sede en la calle Fortuny de Madrid promueve sus actividades científicas, académicas y culturales de prestigio. Marañón quiere impulsar un espacio de encuentro y de referencia en su nuevo cargo, que se une al de presidente del patronato del Teatro Real. Le acompañarán en su gestión el historiador Juan Pablo Fusi y la psiquiatra María Inés López-Ibor.
Marañón lleva vinculado a la Fundación desde su origen. Primero como miembro del patronato de la Ortega y después como patrono fundador (tras la fusión en 2010) y, por último, como vicepresidente primero. José Varela Ortega propuso su elección esta vez, una decisión corroborada por los patronos. “El nombramiento”, según un comunicado de la institución, “viene a reconocer su compromiso con el proyecto intelectual y cívico que ha hecho de la Fundación desde hace cuarenta años, una referencia en el ámbito de las ciencias sociales, las humanidades y las ciencias de la salud”.
Una vez ratificado en el cargo, Gregorio Marañón presentó un proyecto conformado por varias líneas estratégicas: “El refuerzo del área académica con un modelo de excelencia; la proyección cultural de la Fundación como espacio de encuentro intelectual y político, fiel a su espíritu liberal e independiente; la ordenación de la actividad internacional y la consolidación de su estabilidad económica”. Estas líneas las llevará a cabo junto a un equipo liderado también por su directora general, Lucía Sala Silveira.
Gregorio Marañón es abogado, empresario y académico con una fuerte vinculación al mundo de la cultura. Aparte de su puesto en el Teatro Real, es miembro de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando, de la Academie Europeenne des Sciences, Arts et Lettres y de Real Academia de Bellas Artes y Ciencias Históricas de Toledo. Cuenta, entre otros reconocimientos, con la Gran Cruz de Alfonso X, la Medalla de Oro al Mérito en las Bellas Artes, la Medalla de Oro de la Comunidad de Madrid y la de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, y es Comendador de la de la Legión de Honor Francesa. También ha sido distinguido como doctor Honoris Causa por la Universidad de Castilla-La Mancha.
Juan Pablo Fusi ha sido catedrático de Historia de la Universidad Complutense de Madrid y es miembro de la Real Academia de la Historia y de Jakiunde, Academia de las Ciencias, de las Artes y de las Letras del País Vasco. Ha sido director de la Biblioteca Nacional, director académico de la Fundación Ortega y Gasset y director del Centro de Estudios Ibéricos St. Antony's College de Oxford. Por su parte, Inés López-Ibor, es profesora titular del Departamento de Medicina Legal, Psiquiatría y Patología de la Universidad Complutense de Madrid, académica correspondiente de la Real Academia de Medicina y de la Real Academia de Doctores de España y presidenta del Patronato de la Fundación Juan José López-Ibor.
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