La fiesta de San Fermín en 10 cifras

El Ayuntamiento de Pamplona destina a las fiestas de San Fermín este año un 6% más que en 2017. El gasto asciende a 2,24 millones si se suma el dinero invertido en contratar personal de refuerzo y a alquilar los aseos móviles.

El número de agentes de la Policía Nacional, Guardia Civil, Policía Foral y Policía Municipal encargados de la seguridad de los Sanfermines de este año. El grueso del dispositivo lo integran los efectivos de la Guardia Civil (796), seguidos de Policía Nacional (950), Policía Foral (720) y Policía Municipal (400).

Año en que por primera vez se lanzó un cohete para dar comienzo a los Sanfermines, lo que después se conoció como el Chupinazo, por parte del pamplonés Txupin Etxepare, estanquero de la Calle Mayor. La costumbre continuó hasta 1936, fecha en la que se inició la Guerra Civil y en la que también murió asesinado Etxepare. La costumbre se reanudó en 1939.

El trazado, que mide 848,6 metros, suma casi un millar de postes, 2.700 tablones y 4.000 cuñas para separarlo de forma conveniente del resto de la ciudad. Además, existen 70 puertas para salir del vallado y 6 más que van cerrando el recorrido al paso de las reses para evitar que estas retrocedan.

La obra ganadora con el título Pamplona, ciudad de luces fue la que más votos reunió, el 33%: 2.200 papeletas de las 6.511. Se han registrado este año menos carteles que en las dos últimas ediciones: 327 de ellos provienen del ámbito nacional y cinco son creaciones del extranjero.

Los toros de esta ganadería son las que más veces han corrido en la fiesta pamplonica. La historia de esta ganadería ha dejado 16 heridos por asta y 184 traumatismos. El sábado 14 de julio sus reses volverán a correr por las calles de Pamplona.

El tiempo que se prolongó el encierro más largo de todas las ediciones de San Fermín abarcó 30 minutos. Ocurrió el 11 de julio de 1959. Un miura se rezagó y fue necesario recurrir a un perro para que mordiera al toro y consiguiera introducirlo en los corrales.

De entre las víctimas, dos de ellas eran de origen extranjero: un mexicano que falleció en 1935 y un estadounidense que perdió la vida en 1995. El último muerto, el alcalaíno Daniel Jimeno Romero, fue empitonado en el cuello en el tramo de Telefónica el 10 de julio de 2009.

Según un estudio hecho público por la Universidad Pública de Navarra, el año pasado se produjeron 22 denuncias por agresiones sexistas a mujeres. El incremento de las estas por delitos de abusos o agresiones es un hecho: de no recibirse ninguna en 2006 y 2007 a las 22 de 2017.

Las suspensiones de la fiesta de San Fermín siempre se han producido por motivaciones políticas. Las dos primeras se dieron durante 1937 y 1938 (en plena Guerra Civil). La tercera, en 1978, un estudiante murió a raíz de una herida de bala en la cabeza durante unos enfrentamientos entre policía y manifestantes. La última suspensión se produjo en 1997 tras el asesinato por parte de ETA de Miguel Ángel Blanco.