Christie´s no consigue vender un Bacon valorado en 55 millones de euros
La subasta del cuadro 'Estudio para Papa Rojo, segunda versión de 1962' se queda sin comprador
Las expectativas de récord que había generado la subasta del último de los retratos de la famosa serie papal de Francis Bacon, escondido de la luz pública desde hacía 45 años, se han visto frustradas esta noche en Londres al no conseguir la sala Christie´s sellar su venta. El cuadro Estudio para Papa Rojo, segunda versión de 1962 salió a la puja por 50 millones de libras (55 millones de euros) y llegó a alcanzar en su desarrollo una oferta de 58 millones (64 millones de euros), pero esa cifra resultó insuficiente para cubrir el precio de reserva.
El desenlace de la subasta ha sorprendido a quienes especulaban que la obra podía rebasar los 60 millones de libras (66 millones de euros), batiendo de ese modo un récord europeo aunque no mundial: la sede de la misma casa Christie´s en Nueva York vendió hace cuatro años un tríptico que el artista anglo-irlandés (1909-1992) ejecutó de su colega y amigo Lucien Freud por 89,3 millones de libras (el cambio de la época de 142 millones de dólares desembolsados).
Otra pintura de Bacon ofertada en en el mismo lote y también integrante de su obsesiva serie inspirada en la obra de Diego de Velázquez Retrato del Papa Inocencia X sí selló su venta por 10 millones de libras. Titulado Head with Raised Arm y fechado en 1955, el cuadro permanecía todavía más tiempo (medio siglo) lejos del ojo público y a resguardo en una colección privada.
Estudio para Papa Rojo x (de casi dos mettos de altura y 1,5 de ancho) es uno de los títulos más singulares de la serie papal, que integra en la composición del pontífice un reflejo de George Dyer, amante y muso del artista durante ocho años. La dramática escena que recoge la obra fue completada por Francis Bacon tan sólo 36 horas después de que Dyer se suicidara, y seis meses después de su primera exhibición pública en el Grand Palais de París. El portavoz de Christie's Francis Outred ha calificado la obra como “una trágica premonición que une a las dos grandes musas de Bacon, el Papa y George Dyer, por primera y única vez”.
La obra no logró convertirse en la estrella de la subasta, pero su exhibición en Christie´s días antes de la sesión de hoy ha sido especialmente apreciada por los expertos. El arte singular, perturbador y brutal de Francias Bacon le convirtió en una de las figuras esenciales del arte del siglo XX, pero el legado que hoy se expone en los museos del mundo apenas alcanza el tercio de su producción. Una buena parte de su obra permanece en manos privadas, a ménudo reacias a la hora de sacarlas a la luz o cederlas en préstamos a instituciones públicas.
Tal es el secretismo de algunos propietarios que el autor del último catálogo razonado de la obra del genio anglo-irlandés, Martin Harrison, explicaba el año pasado a El País que sólo pudo incluir una imagen antigua del cuadro Head with Raised Arm (tomada de un antiguo catálogo editado en Turin), pero no determinar su localización. Chritie´s se había marcado un gran tanto exponiéndo a esos dos papas ocultos antes de la subasta, pero a la postre no ha podido esta noche rematar la venta del más valioso.
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