Adele, en el concierto que cierra su tour: “No sé si volveré a ir de gira”

La noticia cayó como un jarro de agua fría sobre los 40.000 espectadores que se congregaron este domingo en el Mt Smart Stadium de Auckland, en Nueva Zelanda, para asistir al tercer concierto de Adele en la ciudad escucharon . En el recital, que cerraba su gira mundial para promocionar 25, su último álbum, la cantante británica confesó que no sabe si volverá a actuar de nuevo.

Su agente, Michael Cooper, ya había sembrado la duda la semana pasada con unas declaraciones al Daily Telegraph: "Puede que no volvamos a verla de nuevo". Y el domingo, fue la propia Adele quien expuso sus motivos sobre el escenario al final de su tour, que ha durando 15 meses. "No sé si volveré a ir de gira, es algo que no se me da bien... los aplausos me hacen sentir vulnerable", declaró, según recoge The New Zealand Herald, en alusión al pánico escénico que sufre desde hace años.

Adele describió su gira como el mayor logro de su carrera y admitió que había cambiado su vida. "Vosotros sois la única razón por la que hago esto. No estoy segura de que sea lo mío", explicó tras cantar durante horas bajo una lluvia torrencial al aire libre. "Acabo de pasar dos horas en peluquería y maquillaje para nada'', bromeó la cantante, quien actuó con la ropa empapada y también usando un chubasquero rosa de plástico. 

El de Auckland era su último concierto antes de que termine formalmente la gira en su ciudad natal, Londres, donde tiene previstas cuatro presentaciones en el Wembley Stadium este verano. El pasado mes de febrero, la artista británica se alzó con los cinco premios a los que aspiraba en la 59 edición de los Grammy, incluidos los tres principales: mejor álbum del año (25), mejor grabación del año y mejor canción del año, ambos por Hello.

La cantante, de 28 años, ya hizo una pausa en su carrera cuando nació su hijo Angelo, en octubre de 2012, y no volvió a lanzar disco hasta tres años después. "Lo primero que hago en la vida es ser madre, luego va mi vida personal y luego va mi trabajo", declaró a Vogue. En septiembre, The Telegraph y The Sun ya aseguraron que cuando terminara su gira mundial, la cantante se tomaría un largo descanso de una década para dedicarse al 100% a Angelo.