La urna cineraria de Carrie Fisher es una enorme píldora de Prozac
La actriz, célebre por ser la princesa Leia de 'Star Wars', era conocida también por su ironía y por afrontar con humor sus adicciones
Todos los que la conocían destacaban la gran ironía de Carrie Fisher. Así que sus familiares pensaron que su entierro también tendría que ser coherente con ello: las cenizas de la actriz fueron depositadas en una urna con forma de una enorme píldora de Prozac, un conocido antidepresivo. Fisher no escondió nunca su lucha contra la depresión y las adicciones a drogas y alcohol. “Se trata de una antigua píldora de Prozac de porcelana, de los años cincuenta, que era una de las pertenencias más preciadas de Carrie, su favorita. La amaba. Bilie [Lourd, hija de Carrie] y yo no pudimos encontrar nada apropiado y pensamos que esto le gustaría”, declaró su hermano, Todd Fisher, a medios estadounidenses.
Carrie Fisher's urn is a huge Prozac pill https://t.co/l9ns7qKcmz pic.twitter.com/0xbB7rVze2
— The Hollywood Reporter (@THR) January 6, 2017
Carrie Fisher falleció el pasado 28 de diciembre a los 60 años, por las consecuencias de un infarto que sufrió días antes en un vuelo de Londres a Los Ángeles. Justo un día después murió también su madre, la célebre intérprete Debbie Reynolds, quien tenía 84 años. Reynolds fue enterrada ayer en el Forest Lawn Memorial Park de Los Ángeles con parte de las cenizas de Carrie, tras un funeral privado al que asistieron Lourd y Todd Fisher. "Está ahora juntas y estarán juntas aquí y en el cielo", explicó Todd, que ha sido el encargado de llevar al cementerio las cenizas dentro de la píldora de Prozac gigante. Todd Fisher aseguró además a The Hollywood Reporter que la familia se plantea levantar un monumento público en recuerdo de ambas en el futuro.
Fisher era célebre sobre por su papel de la princesa Leia en la saga de Star Wars, donde aparece en cuatro películas: Una nueva esperanza (1977), El imperio contraataca (1980), El retorno del Jedi (1983) y El despertar de la fuerza (2015). Antes de su fallecimiento, la intéprete llegó a terminar también su trabajo en el Episodio VIII de la saga, y Disney debate ahora qué hacer con su personaje para la novena y última entrega, en la que también estaba prevista la presencia de Leia. Más allá de Star Wars, Fisher también participó en filmes tan conocidos como Hannah y sus hermanas, de Woody Allen, o Granujas a todo ritmo (The Blues Brothers).
La actriz escribió también varios libros en parte autobiográficos, donde se reía a menudo de sí misma y sus adicciones. En el último, titulado The Princess Diarist, desvelaba también el romance que vivió con Harrison Ford, durante el rodaje de Star Wars: “Fue tan intenso... Éramos Han y Leia durante la semana y Carrie y Harrison los fines de semana”. Además de sus libros, Fisher también protagonizó un monólogo teatral, Wishful Drinking, en el que afrontaba abiertamente y con humor sus problemas. Así lo hizo toda la vida. E incluso después.
Babelia
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.