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MAD COOL 2016

Ben Bridwell, líder de Band of Horses: “Siempre seré un músico ‘amateur”

El cantante actúa mañana junto con su banda en el festival Mad Cool de Madrid

La sincera humildad de Ben Bridwell desmonta cualquier mito de estrella del rock. En una mañana pegajosa de abril en Austin, en mitad del festival SXSW, el líder del grupo americano Band of Horses llega con un café en la mano y su uniforme: vaqueros, camisa de cuadros y gorra. Intenta disimular el cansancio, pero no tarda en reconocerlo: ha volado hasta la capital texana casi directo desde el estudio de grabación donde Band of Horses acaba de terminar el quinto disco de la banda, Why Are You Ok. Un álbum que llega cuatro años después de Mirage Rock, seis después de Infinite Arms, sus esfuerzos más masivos y menos satisfactorios a posteriori; casi 10 después de que abandonara Seattle y se instalara en su pueblo natal de Carolina del Sur para “disfrutar de la vida familiar” con sus cuatro hijas y su mujer.

Todo eso está en el nuevo disco, que Band of Horses tocará mañana en el festival Mad Cool de Madrid. “Quería hacer un álbum más parecido a mis maquetas, que no fuera lavado por un productor. No quería que hubiera un gran salto de la maqueta al disco final, no quería que perdiera su identidad”, explica Bridwell. “Creo que hubo un momento decisivo cuando me di cuenta de que me gustaba mi amauterismo tonto en mi forma de tocar la guitarra o el bajo. Hay algo bonito en todo eso. Me di cuenta de que no quería perderlo”.

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Nada es por casualidad en este nuevo álbum. Y a la vez todo lo es. Hasta ahora, Bridwell estaba acostumbrado a irse “a una cabaña, aislado, para escribir canciones”. “Pero hace dos años compramos una casa y me instalé en el garaje, fui acomodándolo, poniendo todos mis instrumentos hasta que pareció casi un estudio. Cada noche, cuando las niñas se van a la cama, me meto a trabajar ahí hasta la madrugada, y empiezo a tocar todos mis instrumentos esperando a que algo pase”, cuenta. Pero tardó en pasar. “Tuve unos cuantos momentos de bloqueo porque creo que estaba pensándolo demasiado. Escribir las letras fue también complicado; hasta que empecé a quejarme sobre el propio proceso de escribir en las canciones –se ríe–. Fue cuando decidí desacelerar, no meterme prisa. Y estoy feliz de haberlo hecho así porque gracias a eso ocurrieron muchos felices accidentes”.

Contar con Dave Fridmann para la mezcla fue uno de esos “felices accidentes”. “Estaba ocupado, pero como no teníamos prisa, al final acabó sacando tiempo”, dice Bridwell. El tiempo también le permitió meter en el disco una de sus canciones favoritas, In a Drawer. “Estábamos acabando y, dos semanas antes, me propuso el productor que la probáramos de nuevo. Yo encantado porque la había escrito hacía siete años, cuando nació mi primera hija, pero nunca había conseguido acabarla porque no soy bueno escribiendo los estribillos”, recuerda. La desempolvó, escribió un estribillo y hoy es uno de los primeros singles que publicaron como avance de Why Are You Ok. “Lo conseguí porque fui paciente, porque seguí intentándolo y nunca abandoné. Y así logramos que J. Mascis, de Dinosaur Jr., una de mis bandas favoritas, cantara conmigo. Fue como ponerle el lazo a esta canción que llevaba tanto tiempo arrastrando”.

El valor para componer el disco que de verdad sentía lo encontró en parte gracias a su nuevo productor, Jason Lytle, quien hasta ahora sólo había producido sus propios álbumes con su exbanda Grandaddy. “Ha sido mi mentor”, confiesa Bridwell. “Jason entiende el indie rock, comprendía mi estilo un poco más. Me ayudó a volver al tipo de música que a mí me gusta escuchar, que puede ser sucia o discordante, que no tiene por qué ser correcta, que tiene su propia idiosincrasia, que es casi algo de niños”.

Lytle fue en ocasiones un obsesivo del control, lo que provocó “algunos momentos incómodos”, admite Ben Bridwell; pero el resto de Band of Horses, la misma banda exacta con la que ya van tres discos, “hizo un ejercicio de confianza” ciega en su líder y en el nuevo camino y proceso que había decidido tomar. “Me dejaron soltar este disco que tenía en mi mente, y que siento es muy diferente a los anteriores. Quizá me equivoque, pero gracias a Jason y otros colaboradores [Rick Rubin, J. Mascis] no se ha perdido en el camino”.

Why Are You Ok llega justo 10 años después del primer disco de Band of Horses. Una década en la que Ben Bridwell ha aprendido a sentirse “cómodo como líder de una banda de rock”. “Será porque vas cumpliendo años, me siento más a gusto como persona, o porque llevamos ya tanto tiempo tocando juntos, pero estoy feliz con nuestro trabajo. Me siento orgulloso de lo que hemos hecho antes, pero no tengo miedo de continuar hacia este nuevo camino”, relata. Aunque eso no significa perder su alma de amateur. “Siempre lo seré. No quiero ser el mejor guitarrista del mundo, y en este disco volví a tocarla como al principio, así conseguí sonidos diferentes. Es de alguna forma lo que me define, me gusta simplemente tocar con la gente”, continúa. “Hasta en eso he mejorado, ya no tengo tanto miedo de tocar ante el público. Aún me pongo nervioso, pero ya no estoy aterrorizado”. Mañana en el Mad Cool, uno de los primeros conciertos de la banda con el nuevo disco, lo podrá demostrar.

Papá rockero

“La vida familiar como mínimo te obliga a no quemar el dinero, a volver al trabajo constantemente y no perder el tiempo”, se ríe Ben Bridwell, padre de cuatro hijas. Se ha convertido en un músico disciplinado que compone sólo por las noches cuando ellas duermen. Por la mañana, las lleva al colegio, y vuelve a casa a repasar lo que hizo la noche anterior y dormir un par de horas “antes de que vuelvan a casa”. “Están en toda mi música, algunas canciones las hablan directamente”, explica. Hasta el título del álbum, Why Are You Ok, “sin signos de interrogación”, salió de un mensaje que su segunda hija mandó por error a una profesora “cuando no sabía aún ni escribir ni leer”. “A la primera le escribí una canción en el tercer álbum, For Annabelle, la segunda me preguntó que cuando escribiría para ella, pero no puedo forzar. Al fina ha puesto el nombre del disco”.

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