“Candela Peña está sensacional en ‘Los vecinos de arriba’, de Cesc Gay”
El crítico teatral y columnista Marcos Ordóñez ha hablado con los lectores
El crítico teatral y columnista habló con los lectores de obras, actores, series...
1Antonia Iborra 13/04/2016 13:04
Señor Ordóñez, ¿ha visto algo interesante de teatro últimamente?
Hola, Antonia. Te contesto telegráficamente. En Madrid: 1) La “Celestina” de Gómez, en la Comedia. Excelente versión de Gómez y Brenda Escobedo, y muy buen reparto en el que destacan Gómez (cómo no), Raúl Prieto y Marta Belmonte. Pega fundamental: la lentitud, el ritmo que (a ratos) se empantana. Se me ocurren algunas causas, pero ya las comentaré detenidamente en Babelia. O lo intentaré. 2) “Los vecinos de arriba”, de Cesc Gay, en La Latina, con nuevo y potente reparto. Tenía muchas ganas de ver en escena a Candela Peña, que está sensacional. Teatro lleno y feliz y algo que hacía tiempo que no veía: el público aplaudiendo réplicas. En Barcelona, Arnau Vilardebó me recomendó a una fiera y me alegro de haberle hecho caso: la colombiana Carolina Rueda con “El juego de las sombras”, en La Casa de los Cuentos, un íntimo teatro de Gràcia. El espectáculo es una mixtura de relatos de Héctor Abad Faciolince, Maria Teresa Andreotto y Santiago Mutis, entre otros, narrados con una nitidez, una gracia y una fuerza descomunales. Atentos: comienza gira por España. Hablando de fieras, otra recomendación: vuelve la enorme Esperanza Pedreño con “Mi relacion con la comida”, de Angélica Liddell. Esta vez va al madrileño Teatro del Barrio, del 18 de abril al 8 de mayo, y tampoco conviene perdérsela.
2Fans Total 13/04/2016 13:09
¿Le ha echado un vistazo a “El mundo de la tarántula”, las memorias de Pablo Carbonell? ¿Qué tal pinta?
Buenos días, FT. Llevo pocas páginas, pero de momento compruebo que me pone de un humor estupendo su lectura. Por lo que cuenta, y sobre todo por cómo lo cuenta, pienso que Carbonell es tal como me parecía: un tipo estupendo y sin imposturas, que habla sin pelos en la lengua de sus aciertos y sus tropiezos. Algo que me hace seguir leyendo unas memorias, además de la naturalidad del estilo, es ver como el narrador habla de su familia y de la gente que le ha querido y le ha hecho como es. Si no percibo gratitud y generosidad, dejo el libro. Y desde luego no es el caso. Hojeándolo, veo que está lleno de historias divertidas y profundas al mismo tiempo, y de enseñanzas (lo que hay que hacer y lo que no conviene) para quienes estén a punto de entrar en el mundo del teatro y de la música. Y he pegado no pocas carcajadas ante salidas tan inesperadas como esta: “Decir que Ibiza tiene un aire ibicenco es una gilipollez que no les voy a ahorrar”. Continuaré, con placer.
3Emilio Ballester 13/04/2016 13:17
Señor Ordóñez, ¿sabe algo de ese musical inglés sobre “Groundhog Day”, o sea, “Atrapado en el tiempo”?
¿Apetece mucho, verdad, Luisa? Y huele a exitazo. Sondheim quiso convertir la historia en musical hacia el dos mil y pico, pero después de darle muchas vueltas se tiró del carro diciendo que el original era inmejorable. Ahora firma el libro Danny Rubin, que escribió el guión de la película (con Harold Ramis, su director), y la música y las canciones corren a cargo de Tim Minchin, el hombre de “Matilda” (y buena parte del equipo también es de “Matilda”). Dirigirá Matthew Warchus, el responsable del Old Vic, y allí se presenta en verano. Las previas comienzan a mitad de julio. Imagino que ya no debe quedar ni media entrada, porque en principio solo han anunciado diez semanas (hasta mitad de septiembre): el plan es que salte a Broadway en marzo, lo que supone que las previas neoyorquinas comenzarían en enero. Veo que en la página del Old Vic solo está confirmado el protagonista, el americano Andy Karl ( “Legally Blonde”, “Wicked”, “Rocky”, “On the Twentieth Century” y muchas más) en el rol, claro está, de Bill Murray. Y que “further cast to be announced”.
4Miguel Ángel Herrero 13/04/2016 13:22
¡Saludos, Marcos¡ En un mensaje del Día Mundial del Teatro escrito por Richard Burton oí por primera vez el nombre de William Saroyan donde se le mencionaba a él y a una obra de teatro suya. Por respuestas que tu has dado en ocasiones, creo que también lo has mencionado como uno de esos escritores que te interesan. ¿Qué me puedes contar de Saroyan? Gracias por estar ahí. P.D.: Ya tengo entradas para Dansa d'Agost este fin de semana que ando por Barcelona.
¡Saludos, Miguel! Stephen Fry decía que Saroyan fue uno de los escritores más subvalorados del siglo veinte: estoy de acuerdo. Lo descubrí a los doce años y para mí sigue siendo una especie de hermano mayor. Lo primero que leí de él fue “La comedia humana”, y las aventuras de Homero McCauley me fascinaron. La película, por cierto, tiene cosas hermosas pero demasiada melaza para mi gusto. Pienso ahora en ese libro como una mezcla de Twain con Steinbeck y Thornton Wilder, el Wilder de “Nuestra ciudad”. Y creo que Saroyan debió influir mucho en Bradbury, a juzgar por “El vino del estío”. Y en el James Agee de “Una muerte en la familia”. También me gustaron mucho los relatos de “Mi nombre es Aram” y la sencillez y la frescura de “Tú estás loco, papá”. Durante una época (años 50/60) se representaba mucho en Barcelona, en teatro de aficionados: solían montar “El tiempo de tu vida” (por la que le dieron el Pulitzer, que se negó a aceptar), “Mi corazón está en las montañas” y “La hermosa gente”. No sé si se monta ahora, aunque la temporada anterior volví a percibir su perfume en el “Somni americà” que Oriol Terrason presentó en el Lliure de Gràcia. (Por cierto, la semana pasada se me olvidó decirte en que el Espai Lliure se estrena estos días – y te puede interesar - “Sota la ciutat”, de Llàtzer García, el autor y director de la estupenda “La pols”, donde, otra coincidencia, flameaba el perfume de Steinbeck).
5Fans Total 13/04/2016 13:30
Maestro,¿cómo sabe cuando de un tema saldrá una novela, un relato, un ensayo o una mezcla de todo ello?
¡Buena pregunta! Respuesta: no lo sé. Cuando acabo un libro pienso que no volveré a escribir otro, que lo que pueda haber aprendido no me sirve, que no se me ocurrirá nada, que estoy en mitad del desierto, y un largo etcétera de desdichas. No se me ocurren “temas”, desde luego. En cuanto a la forma se puede intuir, pero hasta que no le has dado muchas vueltas no lo sabes. La cosa es pillar el tono: no me pongo a escribir hasta que no lo tengo un poco claro. Entonces comienzo a tomar mil notas y a armar una especie de estructura o de guión, como prefieras llamarle (para un artículo o una crónica es más o menos lo mismo, pero en versión reducida). Hubo una época en la que me lanzaba a escribir sin red, alegremente (o inconscientemente), pero el riesgo de comprobar que el tono estaba equivocado (y comprobarlo con muchas páginas hechas) era excesivo: con “Puerto Ángel” llevaba media novela escrita cuando se me paró. ¿El problema? Faltaba toma de tierra. De unos años a esta parte me siento muy a gusto en la mezcla de tonos y de formas. “Juegos reunidos” va por ahí. Gracias por tu interés. Seguiremos informando, si se tercia.
6Fernando Peñarroya 13/04/2016 13:35
Marcos, he leído que han publicado las memorias de Terry Gillian, uno de mis directores favoritos. ¿Te apetece leerlas tanto como a mí?
Lo tengo en la mesita de noche, José. Esperando turno, aunque no he podido resistir la tentación de hincarle el diente a algunas páginas. Libro lujoso en todos los sentidos, repleto de dibujos y fotos, pero también con mucho texto suculento. Fundamental para los amantes de Gilliam, entre los que me cuento. Adoro a ese tipo. Pocos, poquísimos directores han sabido tocar como él las cuerdas de la risa, la emoción y la imaginación desbocada. Sus siete magníficas (sí, mira por donde, es una lista): “Los caballeros de la mesa cuadrada” (lo primero que vi de los Phyton), “Los héroes del tiempo” (flechazo rotundo), “Brasil” (pasmo y reverencia), “Las aventuras del barón Munchausen” (nadie hacía películas así en aquellos días), “El rey pescador” (amor absoluto, incondicional), “12 monos” (más difícil todavía) y “Miedo y asco en las Vegas” (rendido sombrerazo por el riesgo salvaje). Por cierto, el libro se llama “Gilliamismos” y lo ha editado Malpaso. Bien por ellos, pero aprovecho para incitar a la busca y captura de “Terry Gilliam: el soñador rebelde”, un tomazo de quinientas páginas, trabajo de amor ganado, que Jordi Costa y Sergi Sánchez escribieron en 1998 para la Filmoteca Vasca, mitad ensayo, mitad larga conversación con Gilliam. Se ganaron su corazón plantándose en su casa (y “plantándose” es un verbo que se queda corto) con una botella de Anís del Mono. Uno de los doce, obviamente. Pero la historia es más extensa y más loca, o sea: leed también ese libro, de lo mejor y más apasionado que se ha escrito sobre TG.
7Dolors Iborra 13/04/2016 13:38
Sr. Ordóñez, ¿Qué tal el “Don Joan” de Molière con Julio Manrique en el TNC?
Hola, Dolors. Para mi gusto, lástima, la adaptación no acaba de montar. Para citar un solo ejemplo: como la novicia Elvira (precioso personaje en el original de Molière) no resulta del todo creíble en la actualidad, queda reconvertida en una suerte de beata excéntrica. También hay un problema de texto: buena parte de los diálogos, reconvertidos a cuatro manos (Pompermayer, Genebat, Monclús y Selvas) tienen un ritmo mametiano, pero las largas tiradas (las discusiones sobre Dios o el monólogo sobre la hipocresía) resultan plomizas por contraste. Es una de esas funciones que se queda a mitad de camino entre la fidelidad y la reinvención. En positivo: estupendo reparto (Julio Manrique, Manel Sans, Lluis Marco, Cristina Genebat, Anna Azcona, Javier Beltrán, Nausicaa Bonnin, Xavi Ricart) con probado talento y viveza, y buenas ideas de puesta. Mi favorita: la fantasmagoría final en el hotel, muy lynchiana, rematada por la aparición que combina “My Way” con un guiño al “William Wilson” de Poe. Una sensación insistente: que la dirección de David Selvas le hubiera sentado mejor a “Don Giovanni”. Hay que decir, eso sí, que la función está siendo un éxito de público.
8Nicolás Garcia 13/04/2016 13:43
Siento preguntarle esto ya que se lo habrán preguntado ya muchas veces. ¿Cuáles son sus libros favoritos? Mis libros favoritos son El extranjero y Los detectives salvajes. Aunque me queda leer a Kafka, Tolstoi, Proust, Melville, Joyce, Flaubert... Hay tanto que leer.
Hola, Nicolás. Una pregunta como la tuya me paraliza: es como intentar coger el mar con una cucharita. Tengo cien, doscientos favoritos. Recuerdo el primero de todos, el que me dio ganas de intentar, con candidez y fervor infantiles, algo parecido: “El fantasma de Canterville”, de Wilde. Me acuerdo de aquella tarde maravillosa, de aquel juego nuevo: lo cuento en “Un jardín abandonado por los pájaros”. En vez de hacer una lista, te sugiero que vayas pasándote por este chat, si te apetece, porque los favoritos van surgiendo. Hoy, por ejemplo, una pregunta me ha hecho recordar mi antigua pasión por Saroyan. De tu lista de autores por por leer te sugiero dos textos: “Los muertos”, de Joyce (en “Dublineses”), y “La educación sentimental” (o los “Tres cuentos”) de Flaubert. De Proust hay que leerlo todo, porque funciona por capas, por acumulación. Y lleva tiempo, desde luego. Melville nunca ha sido santo de mi devoción. Para entrar en Kafka recomiendo “La metamorfosis”, por supuesto, pero también los relatos de “La condena”.
9Ignacio Galan 13/04/2016 13:48
Hola Marcos. En las últimas ocasiones en las que he ido al teatro en mi ciudad el patio de butacas estaba medio vacío. Además tengo 40 años y soy de los más jóvenes, podría ser el hijo de la mayoría de los espectadores ¿Está siendo una temporada de baja recaudación, se quejan los productores o exhibidores?
Hola, Ignacio. No sé qué decirte: depende de los espectáculos, quizás también de las ciudades, y desde luego de los días. Yo acostumbro a ir al teatro “del jueves en adelante”: comprendo que si has ido un martes o un miércoles quizás no haya tanta gente. Las funciones que he visto esta semana en Madrid (“Celestina” y “Los vecinos de arriba”) estaban a rebosar, con un público que aplaudía entregadísimo. Y también estaba lleno de espectadores apasionados (y era una sala muy pequeña y muy alternativa) La Casa de los Cuentos, en Gracia, para ver “El juego de las sombras”. Acerca de las edades también depende de los días: los domingos suele ir al teatro más abuelos que nietos, para decirlo de algún modo. Pero no puedo generalizar al respecto: he visto a gente de todas las edades. Y veo satisfechos esta temporadas a empresarios, promotores y directores: hay muy buena venta anticipada, me dicen.
10seudonimo pseudonimo 13/04/2016 13:52
Buenos días, leyendo la nueva web sobre Gato Pérez he visto un articulo antiguo de Ramon de España en que habla de un amigo periodista que entrevisto a un poeta al que le gustaba Gato Pérez . ¿Si diéramos con el periodista nos podría decir quien era el poeta ?
Hola, SP. Gato gustaba a muchos escritores. Cosa lógica, porque era un formidable escritor y poeta. Hay canciones suyas (pienso, por ejemplo, en “Clásicos del 79”) que son relatos hiperconcentrados en tres minutos. Y otras, la mayoría, en las que la difícil combinación entre melancolía y vitalismo roza lo alquímico. O esa portentosa “road movie” cantada y en episodios que fue “Flaires de Barcelunya”, uno de sus discos más injustamente olvidados. Hablaba de la juerga y de los descalabros anímicos, de lo que tenía en la tripa y lo que veía a su alrededor. Era un gran artista escribiendo, componiendo, cantando y charlando: sus “teóricas”, como las llamaba, y que brotaban a las horas (y los lugares) más inesperados, sobre los asuntos más singulares, merecían haber sido grabados. Volviendo a tu pregunta, pienso que el poeta podría ser Juan Bufill, aunque, ya te digo, la lista de admiradores era y es extensa. Se lo puedes preguntar directamente a Ramón de España en su portal de Facebook. Ah, y esa web sobre Gato ( www.gatoperez.cat) que están armando sus hijas y muchos amigos, y que acaba de echar a andar, vale mucho la pena: allí encontrarás sus letras, muchas fotos, e imagino que pronto playlists de sus discos.
11Pablo Pérez 13/04/2016 13:55
Hola Marcos. En unos días viene a mi ciudad la obra "Sócrates, juicio y muerte de un ciudadano" de Mario Gas con José María Pou. A mi mujer no le apetece mucho porque tiene miedo de que sea una obra densa y con un lenguaje rebuscado. ¿Es una obra para muy entendidos en el teatro clásico? ¿Merece la pena que intente convencerla? ¡Muchas gracias por estas charlas!
Hola, Pablo. No os perdáis “Sócrates”. Te copio algunos extractos de lo que escribí tras el estreno. Uno: “No teman ustedes encontrarse con un sermón o un asunto lejano: todo lo contrario. Mario Gas ha montado un espectáculo breve, claro, didáctico, irónico y apasionado”. Dos: “Vamos a conocer a un hombre al que le gustaba, más que nada en el mundo, hablar, discutir y razonar, y cuyos nortes eran la verdad, la honestidad y la justicia. O sea, un tipo incómodo, peligroso. Era íntegro. Era valiente. No se mordía la lengua. No se le podía comprar. Por tanto, había que acabar con él”. Tres: “Sócrates es José María Pou, que acerca su llama a las palabras del filósofo, y le da vida, cuerpo y mirada. Un Sócrates sensacional, elocuente y vehemente, sin una gota de retórica. Enorme, transparente trabajo actoral, que parece brotar sin esfuerzo. Una de las grandes interpretaciones de su carrera, y hay mucho donde escoger”.
Me voy a comer un taboulé con pollo para darle la bienvenida al buen tiempo. Gracias a la razón social Morales & Koch, talmente como la versión juvenil de Lemmon & Mastroiani en 'Maccaroni', de Ettore Scola. Y gracias a todas y todos por vuestra atención y vuestras preguntas. Durante el chat he escuchado 'The Melody at Night With You', de Keith Jarrett. Hasta el próximo miércoles.
Babelia
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