Los Reyes inauguran Arco y visitan el espacio de EL PAÍS

Parecen evocar a los habitantes de Lilliput. Y contrastan por su diminuto tamaño con la vastedad del mundo y su inalcanzable conocimiento, representado por una pila de libros y periódicos. Son “los hombrecillos” que la argentina afincada en Nueva York Liliana Porter ha instalado en el stand de EL PAÍS como artista invitada. Y son las figuras de hierro pintado que despertaron la curiosidad de los reyes don Felipe y doña Letizia, que este jueves inauguraron oficialmente la 34ª edición de la feria internacional de arte contemporáneo Arco, que se celebra en el recinto madrileño de Ifema hasta el domingo.

En su recorrido por los espacios que ocupan las 218 galerías de 29 países que hoy se abren al público, los Reyes se detuvieron en los stands más representativos de la feria, entre ellos el de EL PAÍS.

En este espacio, marcado por la sutileza y elegancia de las obras de la instalación de Porter Últimas noticias (2014-2015), los Reyes se interesaron “especialmente por la presencia de los distintos personajes diminutos que pueblan mis obras, por el modo en que aparecen”, explicó la creadora al término de la visita.

“La verdad es que parecían sinceramente interesados; han sido muy agradables y me han hecho varias preguntas, aunque no sé si con mis explicaciones les he dejado hablar mucho”, bromeó Porter

La comitiva oficial, encabezada por don Felipe y doña Letizia, fue recibida por la artista en compañía de los adjuntos a la dirección de EL PAÍS, Juan Cruz y Javier Ayuso, y la responsable del suplemento cultural Babelia, Berna González Harbour.

Formaban parte de esa comitiva el ministro de Educación, Cultura y Deporte, José Ignacio Wert; el presidente madrileño, Ignacio González, y la alcaldesa de Madrid, Ana Botella. Y destacó, además, la presencia de Carmen Cervera en compañía de su hijo y de su nuera. A todos ellos les guiaba el director de Arco, Carlos Urroz.

Los directivos de EL PAÍS también atendieron las preguntas de los Reyes, que por unos minutos se aislaron del estrépito de la feria para introducirse en el mundo íntimo de los hombrecillos de Porter, que intentan sobrevivir ante la inmensidad del mundo, abrumados y admirados por la imposibilidad de absorber el flujo del conocimiento, simbolizado por las pilas de periódicos y de libros, entre los que se encuentran Los viajes de Gulliver, que llevaron al protagonista de la inmortal novela de Jonathan Swift a Lilliput, el país de seres diminutos.

Lo explica Porter con sus palabras: “En la parte de la instalación Sin título con lector, uno va descubriendo pequeñas narrativas. En general, es el hombre que está leyendo cosas del presente, del pasado y del futuro, pero que nunca acaba de entender del todo, porque la vida no da para estudiar y saber todas las cosas”.

La autora argentina mantuvo su hablar pausado, a pesar de las decenas de periodistas, cámaras y fotógrafos, rodeados de numerosos miembros de la seguridad de la Casa del Rey, que seguían a la comitiva.

Al poco, continuó su explicación señalando su obra: “Uso estos personajes como si fueran un elenco para una obra de teatro y me sirven para decir cosas. Muchos de los personajes que aparecen en mis cuadros y en mis fotografías son recurrentes en mi obra”. “La serie de dibujos Últimas noticias se sitúa entre la comedia y la tragedia, como al fin y al cabo es la misma realidad. Algunos están hechos ex profeso para aquí”, añadió. Los Reyes agradecieron las explicaciones y continuaron su recorrido.

Al igual que venían haciendo como príncipes de Asturias de manera ininterrumpida desde 2009, don Felipe y doña Letizia visitaron Arco durante una hora y media. Al ser Colombia el país invitado este año, se detuvieron especialmente en algunas galerías de ese país americano. Recorrieron los pabellones 7 y 9 del recinto ferial de Ifema, una representación de las piezas expuestas en las 218 galerías participantes de 29 países, 47 de ellas latinoamericanas.

La colombiana Adriana Marmorek explicó a la Reina el proceso de fabricación de la delicada pieza Cita al Jardín de las Delicias, que llamó su atención. Se trata de una flor de cristal soplado, cuya forma está tomada del famoso cuadro del Bosco, y que contiene una cápsula transparente en la que se mueven continuamente dos láminas de pan de oro, impulsadas por un soplo de aire.