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Molotov: “Extrañamos ir a Venezuela a tocar libremente nuestras canciones”

La banda mexicana de rock habla con los lectores sobre sus 20 años y el inicio de su gira por América Latina

Vídeo: Saúl Ruiz
Luis Pablo Beauregard

“Una canción del presidente del PRI y de Televisa haría implosión. Es la suma de todos los males”, ha dicho este miércoles Tito Fuentes, integrante de Molotov en una charla con los lectores de EL PAÍS. Dos de los cuatro músicos del grupo mexicano de rock charlaron en las oficinas de este periódico en la Ciudad de México sobre música, política y la gira que realizarán por América Latina y Europa para festejar sus 20 años juntos. “Extrañamos ir a Venezuela a tocar libremente nuestras canciones”, ha afirmado Paco Ayala a un lector de Caracas. "Nuestra relación con Venezuela siempre ha sido con la gente y la gente está muy dividida", agregó Tito.

Molotov lanzó en 2014 Agua Maldita, su séptimo disco de estudio que interpretarán con su potente directo el 15 de febrero como cabezas de cartel del Cosquín Rock, el festival más grande de Argentina. “El público es uno de los más efusivos, uno de los mejores del mundo”, han afirmado los músicos en la charla. Esa fecha es el pistoletazo de salida de una gira que tendrá escalas en los festivales más importantes de la región como el Lollapalooza en Santiago de Chile (14 de marzo), el Vive Latino en la Ciudad de México (15 de marzo) y el Lollapalooza en Brasil (28 de marzo). “Posiblemente en julio iremos a España”, agregaron.

'Puto' es una canción de protesta. No es un tema homofóbico
Tito Fuentes, músico de Molotov

“¿Si vieran al presidente Peña Nieto, qué le dirían?”, cuestionó uno de los lectores a un grupo que ha sido conocido por alzar la voz para criticar a los políticos. “No pasaría nada”, afirmó Tito. “Si la Constitución se la pasa por los huevos, imagínate cuánto le importa lo que le diga un ciudadano”. Ayala afirmó que canciones de su primer álbum, ¿Dónde jugarán las niñas?, que cumple 18 años este 2015, como Gimme the Power y Voto Latino siguen vigentes para hablar de la realidad que vive el país.

Una de las canciones más polémicas del grupo, Puto, que provocó que el movimiento de liberación gay del País Vasco denunciara al grupo ante el juzgado en 1998 por discriminación y odio a los homosexuales, también fue tema de la conversación. “Aunque usted no lo crea”, explicó Fuentes al lector Javier Castilla, “es una canción de protesta. Se refiere a la cobardía de dirigentes y de los tres poderes mexicanos que no sirven para ni madres. No es un tema homofóbico”.

En el último disco hay una que se llama No existe”, respondió Fuentes a un lector que le preguntaba por canciones de protesta más próximas. “Se llama así porque el Gobierno nos quiere dirigir a un lugar inexistente. Como artistas lo más complicado es hablar de lo mismo, como la corrupción y la injusticia, de una manera original. Como dice la frase: La acusación precisa y el insulto bien definido”, agregó.

Nos han invitado varias veces a hacer un unplugged, pero queremos que sea en chino
Paco Ayala, músico de Molotov

El grupo también contó en las oficinas de EL PAÍS algunos de sus secretos. Un lector los cuestionó por qué usan dos bajistas. “Al inicio de la banda Miky comenzó a tocar con otro bajista. Cuando se fue se extrañaba el sonido de los dos bajos en las canciones. Miky fue a una peda y me encontró a mí”, explica Paco Ayala. “Solo ha habido un concierto con un bajo”, reveló Tito.

Molotov podría desembarcar en Europa este verano. “Hay muchos planes, lo que no hay es dinero”, dijo Paco. Han descartado dúos con otros grupos mexicanos que tienen gran popularidad en España. “Gracias, no”, dijo Fuentes a un lector que lo invitaba a cantar junto a Maná. Y a otro que les pedía un unplugged respondieron: “nos han invitado varias veces a hacerlo, pero queremos que sea en chino”.

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Sobre la firma

Luis Pablo Beauregard
Es uno de los corresponsales de EL PAÍS en EE UU, donde cubre migración, cambio climático, cultura y política. Antes se desempeñó como redactor jefe del diario en la redacción de Ciudad de México, de donde es originario. Estudió Comunicación en la Universidad Iberoamericana y el Máster de Periodismo de EL PAÍS. Vive en Los Ángeles, California.

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