Philippe-Gérard, compositor de Piaf y Montand
Juliette Gréco, para quien compuso entre otros 'Les Canotier', lo describió como un músico sutil y completo
Recorrer la carrera de Philippe-Gérard es darse un paseo por la canción francesa, de Edith Piaf a Juliette Gréco, pasando por Yves Montand, a través de un centenar de temas. Desconocido del gran público, el compositor dio también banda sonora al cine de destacados cineastas como Alain Resnais. Falleció el pasado 18 de mayo, a los 89 años, como consecuencia de una larga enfermedad.
“Philippe-Gérard fue un maravilloso músico con el don de poner las notas justas sobre las letras de los autores”, destacó la ministra de Cultura, Aurélie Filippetti, en un comunicado. “Fue un artista que sabía perfectamente sentir lo que hay de más íntimo en el universo de cada intérprete y ofrecerle así melodías que se les parecían”, añadió. En sus memorias, Gréco lo describió como “el músico sutil y completo que todos conocemos”.
Nacido el 13 de septiembre de 1924 en São Paulo, en Brasil, de verdadero nombre Philippe Bloch, inició sus estudios de musicología en Francia, donde conoció al gran Maurice Ravel. Al estallar la II Guerra Mundial huyó a Ginebra, donde coincidió entre otros con el maestro Igor Stravinsky, también refugiado en Suiza, gran admirador del autor del Bolero.
De vuelta a Francia tras la liberación, escribió en 1945, junto a Guy Lafarge, su primera melodía para Edith Piaf, entonces ya una estrella, Pour moi toute seule, que marcó el gran despegue de su carrera. Para La Môme escribió también Marie la Française (1950), Avec ce Soleil (1954), Miséricorde (1955) y Le Chevalier de Paris (1950). Esta última fue traducida al inglés, When the world was young, por Johnny Mercer, sobre una letra de Angèle Vannier, e interpretada entre otros por la voz en persona, Frank Sinatra, en 1961. Fue la misma Piaf quien le presentó a otro artista que fue clave en su carrera: Yves Montand, que confió en él a lo largo de toda su carrera. Philippe-Gérard compuso para él algunos de sus mayores éxitos, como Le chat de la voisine (1958), Rengaine, ta rengaine (1961) y sobre todo La Chansonnette (1961).
Entre los intérpretes con los que trabajó se encuentran otros grandes nombres como Henri Salvador, Cora Vaucaire, Line Renaud, Jeanne Moreau, Maurice Chevalier, Sacha Distel y la mítica Juliette Gréco, para quien compuso entre otros Les Canotier, que grabó en 1963, y que la cantante definió como “belleza pura y perfecta, un manet, un monet, un renoir en música”. Puso música también al texto de Boris Vian La Sermonette, escrito en 1965, para que lo pudiera interpretar Serge Reggiani.
En la dilatada carrera del compositor, que trabajó también para la radio y la televisión y dirigió un tiempo una pequeña orquesta, destaca igualmente su relación con el cine. Entre las bandas originales de las que fue autor se encuentran Du rififi chez les hommes (1955), de Jules Dassin; Bébert et l'omnibus (1966), de Yves Robes; La Carapate (1978), de Gérard Oury; y dos de Alain Resnais: La vida es una novela (1986) y Mélo (1986).
Babelia
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