El detenido por filtrar lo nuevo de Extremoduro lo vendía ‘online’
Trabajaba como mozo de almacen en la empresa que distribuyó el álbum El grupo tenía previsto lanzar el álbum el 19 de noviembre pero adelantó la salida 11 días debido a su aparición en la Red “Es la primera detención en España por una filtración de material musical”, según la Guardia Civil
Agila es quizás el disco más celebrado de Extremoduro. Pero, ahora, es también el nombre de la primera operación de la Guardia Civil que identifica y detiene al filtrador de un contenido musical en España. De hecho, el apodo de la investigación es un homenaje al grupo liderado por Robe Iniesta, porque el álbum que se coló online semanas antes de que saliera a la venta es otro de Extremoduro: el último, Para todos los públicos.
El disco iba a salir, originalmente, el 19 de noviembre pero Warner Music acabó publicándolo el ocho. La razón es que ya desde el 24 de octubre un usuario había empezado a colgar en varios foros un mensaje —con fotos y anuncio de “Extremoduro un mes antes” incluidos— en el que ofrecía copias de Para todos los públicos por 10 euros, como ha relatado en una rueda de prensa Óscar De la Cruz, jefe de delitos telemáticos de la Guardia Civil.
Ante el escepticismo de los demás usuarios, E. Q. T., de 31 años, decidió colgar además dos maquetas de baja calidad como prueba de que realmente tenía el disco entre manos. Y así era: lo había conseguido al trabajar como mozo de almacén en Arvato, la empresa encargada de la distribución del álbum, según una fuente de la investigación.
“No es especialmente fan de Extremoduro. Alardeaba de poder conseguir los discos que quisiera antes de que salieran a la venta”, explicó De la Cruz. Lo que los agentes siguen investigando es el cómo: cuando E. Q. T. lo filtró, no podía haber tenido acceso directo al álbum, de ahí que alguien debió pasárselo. Así lo reconoció el detenido (que admitió también su responsabilidad), aunque sin ofrecer nombres, según aclara la misma fuente. Por ello, la Guardia Civil investiga a más personas dentro de Arvato y de la empresa encargada de la fabricación, Novodisc.
E. Q. T. ya ha pasado a disposición judicial y puede ser acusado de un delito contra la propiedad intelectual, lo que acarrea una pena de seis meses a dos años de cárcel. Aunque, para casos especialmente graves, los años de prisión pueden subir hasta cuatro.
Desde luego, grave les pareció lo ocurrido a los representantes del grupo, que pidieron al hombre que retirara el contenido. “No amenaces con denunciarme, que mañana subo el disco a todos los foros de musica y a YouTube y os jodo... así que tranquilo que no lo he hecho ni lo haré, mi intencion era sacarme un dinerillo nada más. Pero ni he vendido ni una copia, así que tranquilo y si quieres denunciar adelante[SIC]”, se puede leer en uno de los mensajes que recibieron como respuesta. Este periódico contactó con Warner Music para poder hablar con Extremoduro pero fue remitido a la rueda de prensa.
Así que ambos cumplieron con sus amenazas. Banda y distribuidora denunciaron la filtración, lo que puso en marcha la operación Agila. Y el cuatro de noviembre el filtrador subió el disco a la Red, llevándose las felicitaciones de decenas de usuarios en este y al otro lado del charco y los insultos de otros internautas, fieles a Extremoduro. “Vaya fans de mierda”, reza uno de los mensajes en los foros, grabados por un vídeo que la Guardia Civil proyectó y puso también a disposición judicial. Ante el juez estarán también las pruebas que los agentes encontraron al registrar el piso madrileño y el puesto de trabajo del detenido: entre ellas, varios archivos digitalizados de Para todos los públicos.
Sea como fuere, el disco empezó a difundirse con la rapidez que caracteriza el mundo de la piratería y el siete de noviembre Para todos los públicos —coherente con su título en el peor de los sentidos— ya se podía descargar de 54 webs. Promusicae calcula un promedio de unas 1.000 descargas por página y un total, por tanto, que ronda las 60.000. Y Warner Music cuantifica en 120.000 euros el daño ocasionado por la filtración preventiva y la necesidad de adelantar el lanzamiento. Aun así, el disco entró en las listas de ventas directamente al número uno, con miles de copias, quizá decenas de miles, [SIC]vendidas[/SIC].
E. Q. T., en cambio, no logró vender ni una.
Babelia
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