En busca del corazón del arte
La Fundación Botín y la Universidad de Yale firman un acuerdo de colaboración para investigar el papel de las emociones en el proceso creativo
La Universidad de Yale y la Fundación Botín firmarán hoy un acuerdo para llevar a cabo una investigación conjunta sobre el desarrollo de las emociones, la creatividad y las artes. Los resultados de la colaboración servirán de base para el programa educativo del Centro Botín, cuya apertura está prevista para junio de 2014.
La colaboración en materia de investigación entre la Fundación Botín y el Yale Center for Emotional Intelligence (Centro de Inteligencia Emocional de Yale) busca centrarse en tres puntos, según un comunicado difundido por la entidad: "El desarrollo y puesta a prueba de un modelo que describa el papel de las emociones y de la inteligencia emocional a lo largo de todo el proceso creativo; cómo pueden aplicarse las artes para favorecer el desarrollo de las capacidades emocionales; cómo se puede potenciar la creatividad en la vida cotidiana y en el trabajo involucrándose en tareas artísticas".
El proyecto se propone llenar un vacío que existe según ambas organizaciones: "La preparación específica que se ofrece en los colegios sobre creatividad e innovación, o sobre inteligencia emocional, es aún escasa". De ahí que el documento subraye que es necesario cultivarlas "para que las personas puedan alcanzar el éxito personal y social y para que la sociedad pueda evolucionar y crecer".
El Centro Botín ha empezado a levantarse esta semana en la bahía de Santander, según el diseño del arquitecto italiano Renzo Piano. A partir de su inauguración, el edificio "aglutinará el proyecto artístico y cultural de la Fundación Botín con su proyecto educativo", como detalla la propia fundación. "El objetivo que se persigue es utilizar el arte para desarrollar la creatividad de las personas, lo que permitirá mejorar su bienestar individual y generar riqueza y desarrollo social y económico", aclara el documento.