_
_
_
_

La recreación de un delirio nazi

Alberto de las Heras plasma en ‘Germania’ la fantasía de la capital imperial que Hitler quiso erigir

Manuel Morales
'Berlin Scholss', uno de los dibujos de Alberto de las Heras.
'Berlin Scholss', uno de los dibujos de Alberto de las Heras.

De entre los muchos delirios de Hitler, hubo uno que tenía nombre de ciudad pero que no pudo levantar, Germania, la que estaba llamada a ser la nueva capital imperial, que nacería de la demolición de parte del centro de Berlín. El artista Alberto de las Heras (Barakaldo, 1973) se empapó de esta y otras historias en sus años de viajes a Berlín, una urbe en la que siempre se ha sentido “como en casa”. Aquel conjunto de edificios que el Führer encargó al arquitecto Albert Speer inspiró a De las Heras para su exposición de dibujos, acrílicos y acuarelas que pueden verse en la madrileña Fresh Gallery hasta el 14 de marzo.

“He querido contar la degeneración de la sociedad alemana de los años treinta y cómo los nazis sometieron a su país desde el abuso de poder pero también con la seducción y con la propaganda de las promesas de una nueva sociedad”, dice De las Heras delante de sus obras.

La primera parte de la muestra Germania es una serie de cinco dibujos a lápiz que recrea las ruinas imaginarias de Berlín tras la derrota a manos de los aliados. Son las consecuencias de la locura nazi. En contraste, entre esas montañas de escombros posan, como fantasmas, modelos vestidas con las primeras colecciones del diseñador Christian Dior, las creadas entre 1946 y 1950. “Mujeres con corsés, grandes faldas y una estética más conservadora. Era el llamado new look, la moda que surgió en Europa y que recordaba a la vieja aristocracia”, señala De las Heras, que ha trabajado de ilustrador para modistos como Antonio Alvarado, Carlos Díez y Ana Locking.

Detalle de una de las obras de la exposición 'Germania' de Alberto de las Heras.
Detalle de una de las obras de la exposición 'Germania' de Alberto de las Heras.

A continuación se exhiben varios cuadros con los que De las Heras ha pintado la Germania “monumental y desmesurada, de edificios y plazas deshumanizadas” que Hitler imaginó pero que solo se pudo esbozar “en unos planos, unas maquetas y un par de edificios” por culpa de la Segunda Guerra Mundial, que convirtió a Speer en ministro de Armamento y Guerra. Entre esas pinturas destaca La noche I, una vista aérea nocturna de la polis que iba a ser el orgullo del Tercer Reich escoltada por retratos de personajes —unos inventados y otros reales—, como el de la mujer de Speer o el del conde Claus von Stauffenberg, que protagonizó uno de los atentados contra Hitler que estuvieron más cerca del éxito. De las Heras llama la atención sobre “un cuadro importante” de exposición, La noche II (Magnus Hirschfeld), que muestra a nazis arrojando libros a una hoguera. El nombre que acompaña al título de esta obra es el del médico judío alemán que se atrevió a defender los derechos de los homosexuales en la Alemania hitleriana.

El recorrido por Germania acaba en las víctimas, con las acuarelas “de un hipotético catálogo de objetos confiscados a los judíos”. Obras de pequeño formato con las que De las Heras muestra, como si fuesen documentos reales, con su sello y su número de serie, una pequeña selección de lo que los nazis confiscaban a los judíos: arte, porcelanas, ropa, candelabros, instrumentos… Además de sus posesiones, esos judíos perdieron sus casas para que se levantara en su lugar aquella fantasía arquitectónica que finalmente nunca vio la luz.

Babelia

Las novedades literarias analizadas por los mejores críticos en nuestro boletín semanal
Recíbelo

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Sobre la firma

Manuel Morales
Periodista de la sección de Cultura, está especializado en información sobre fotografía, historia y lengua española. Antes trabajó en la cadena SER, Efe y el gabinete de prensa del CSIC. Es licenciado en Periodismo por la Universidad Complutense de Madrid y máster de Periodismo de EL PAÍS, en el que fue profesor entre 2007 y 2014.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_