_
_
_
_

Maná en su tercera dimensión

La banda mexicana abre en Murcia su nueva gira española por ocho ciudades

Maná agitó un buen día el cóctel del rock latino y logró otra dimensión en la industria de la música. Una dimensión con la que el rock en español conquistó de manera masiva Estados Unidos y parte de Europa. Ayer regresaron a España -donde no lo hacían desde 2007- para comenzar en Murcia la nueva gira que les llevará por ocho ciudades. Y lo hicieron demostrando que habían entrado en una dimensión diferente. Otro paso más en una ya larga carrera que ha atravesado más de dos décadas.

Conquistaron un concepto de pop global a principios de los noventa. Consistía en mezclar con habilidad la herencia pura de The Beatles con José Alfredo Jiménez, a The Police o U2 con Ruben Blades o Chavela Vargas y a los precursores del rock hispano -de Miguel Ríos a Mecano- con Bob Marley, Carlos Santana o Led Zeppelin. Explosivo.

Con Drama y Luz, su nuevo disco, se han entregado al gótico y le sacan un brillante partido en la puesta en escena diseñada junto al español Luis Pastor para su nueva gira. Lo hacen mediante un sorprendente juego de luz e imagen que adentra la música en cielos, infiernos, conventos y hogueras para escenificar canciones como El espejo o Sor María. Rock en directo en busca de las tres dimensiones a la manera de los grandes.

Pero donde ya han alcanzado otra marca superior es en su virtuosismo rítmico -imponente la ejecución de Oye mi amor, nada más empezar donde brillaba el Maná puro, desnudo y juguetón-, en el color ecléctico de sus himnos, de sus historias de amor comunes y desgarradas, de sus denuncias sociales y ecológicas.

Y donde ya se muestran inalcanzables es siguiendo a un tipo de brazos tatuados, que gasta 10 baquetas por concierto, rompe dos o tres y golpea los tambores hasta el punto de que deben ser recambiados en cada concierto. Se llama Álex González y es ya un baterista legendario en la historia del rock.

Los hay que son puros comparsas, los hay que destacan en la estela de Ian Pace, Phil Collins o Stewart Copeland -su más directa influencia-, pero es difícil encontrar hoy en los circuitos a alguien como González. Él impone en gran parte la marcha, la dirección del grupo con un sentido marcial, napoleónico, que sus compañeros siguen firme y disciplinadamente.

Pero el cuarteto brilla también con el liderazgo carismático de Fher Olvera, un vocalista muy comprometido con el estilo personalísimo de su banda y luce con la guitarra cada vez más libre de Sergio Vallín o la base rítmica sobria pero efectiva de Juan Calleros. Los cuatro, acompañados de tres músicos más y un grupo de cámara sinfónico en algunos temas, han regresado a España para demostrar su atractivo pulso en el panorama de una industria cambiante y frágil.

Crece Maná. Crece y se reinventa en nuevos caminos sin perder la frescura. La que demuestran en sus temas nuevos y en los clásicos, desde Oye mi amor a Rayando el sol, de Clavado en un bar a El muelle de san Blas, una de las canciones más memorables y más vivas escritas en la historia del rock latino. Esa dimensión donde aún reina de manera natural y merecida Maná.

Un momento de la actuación de Maná, ayer noche, en Murcia.
Un momento de la actuación de Maná, ayer noche, en Murcia.PEDRO VALEROS
Toda la cultura que va contigo te espera aquí.
Suscríbete

Babelia

Las novedades literarias analizadas por los mejores críticos en nuestro boletín semanal
RECÍBELO

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_