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Gràcia busca más intimidad en sus fiestas

La Fiesta Mayor del barrio prescinde de los conciertos multitudinarios en busca de un modelo menos conflictivo

Cambio de rumbo: la calle Bailén, que en anteriores ediciones de la Fiesta Mayor de Gràcia acogió el Festival de la Música, quedará desierta del próximo 15 al 21 de agosto. Son las fechas de una celebración que este año prescindirá de "conciertos multitudinarios" en busca de una parranda más familiar y menos conflictiva. La variación parece definitiva: "Tendrá continuidad en el tiempo", ha asegurado el presidente de la Federación Fiesta Mayor de Gràcia, Ricard Estruch, en la presentación del evento.

Esta reconducción de la fiesta pretende disuadir la avalancha de jóvenes ajenos al barrio para ganar en intimidad y evitar la conflictividad que empañó la fiesta en años anteriores. "Queremos que vengan jóvenes, pero no diseñaremos música selectiva para grupos masivos de gente que el barrio no puede absorber", ha aseverado Estruch. La Federación pretende combatir así la evasión vecinal que muchos vecinos emprendían al compás de las fiestas. Las entidades del barrio saludaron la nueva filosofía pese a la incertidumbre del resultado final.

Espacio Lírico y Veladas Mágicas

A cambio, se salpicará Gràcia de pequeños escenarios en el interior del barrio y de las calles engalanadas, protagonistas de esta nueva edición. La fiesta mayor presentará cinco nuevos espacios, como el Espacio Lírico, dedicado a la canción lírica y a la zarzuela; las Veladas Mágicas, en la Casa de los Músicos, en un jardín "idílico" con capacidad para sólo cuarenta personas donde se celebrarán conciertos nocturnos de piano, además de la Plaza del Swing, en la plaza del Diamant, con las notas de jazz y swing. Se estrenarán también en esta edición la Plaza de la Intercultualidad, en la plaza Joanic, para dar a conocer la diversidad como fuente de conocimiento mutuo, y el espacio gastronómico Tasta Gràcia, en la plaza Manuel Torrent, con la participación del Aplec del Cargol de Lleida.

Respecto a los desencuentros que han existido en ediciones anteriores con grupos como el colectivo okupa, que han organizado fiestas en espacios no autorizados, el concejal lo ha calificado de "ocupación del espacio público", por lo que se verán obligados a intervenir.

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