Rusia recuerda el centenario de Rimsky-Korsakov
Conciertos y celebraciones recuerdan al célebre compositor de 'Capricho español'
Con veladas y conciertos Rusia recordará mañana el centenario de la muerte del gran compositor ruso Nikolái Rimsky-Kórsakov, autor de piezas mundialmente conocidas como El vuelo del moscardón y Capricho español. Los actos centrales tendrán lugar en el museo-hacienda
LiubenskVechasha, a unos 800 kilómetros al noroeste de Moscú, lugar donde falleció el compositor el 21 de junio de 1908 y donde mañana se reunirán sus admiradores.
La radio y la televisión emitirá programas sobre la vida y obra del compositor, autor de quince óperas, entre otras obras, que incluyen también música litúrgica. Rimsky-Kórsakov, que escribió óperas cuentos, como Sadko y El zar Saltán, así como tres sinfonías y 79 romanzas, fue el autor de Principios de Orquestación, considerado uno de los mayores tratados en la materia y que fue mundialmente utilizado por los estudiantes de composición durante todo el siglo XX.
Maestro de compositores
A pesar de su formación autodidacta, llegó a ser profesor del Conservatorio de San Petersburgo, formó a más de 200 compositores, directores y musicólogos rusos y su influencia marcó a las generaciones posteriores de músicos. Los afamados compositores Alexander Glazunov, Serguéi Prokófiev e Igor Stravinski se contaron entre sus discípulos. Junto con Mili Balákeriev, César Cui, Alexander Borodin y Modest Músorgski, integró el llamado Grupo de los Cinco, que defendía una música basada en las tradiciones populares rusas.
Era el más joven de ese grupo de músicos nacionalistas que empleaban profusamente elementos del folclor y que constituyó todo un fenómeno en la vida musical de Rusia del siglo XIX. Después de la muerte de Músorgski, en 1881, y de Borodín, en 1887, Rimsky-Kórsakov se dedicó a concluir las composiciones inacabadas de sus amigos. Gracias a sus esfuerzos vieron la luz las piezas maestras El príncipe Igor de Borodín, Borís Godunov y Jovánshina de Músorgski. Le cupo el honor de ser el primer ruso que compuso una sinfonía y de su labor pedagógica se tejieron leyendas.
Cuentan que cuando explicaba a sus alumnos que la última parte de una sinfonía o una sonata debe ser escrita en presto uno de ellos le preguntó: ¿Por qué entonces el cuarto movimiento de la sexta sinfonía de Piotr Chaikovksi es en "adagio lamentoso"? "Porque cada regla tiene sus excepciones. Más aún, éstas son incluso imprescindibles si la regla las viola un genio", contestó el maestro.
Un talento precoz
Nació el 18 de marzo de 1844 en el seno de una familia de aristócratas, en la que los hombres seguían la carrera naval. Aunque desde muy pequeño se manifestó su enorme talento musical, Rimsky-Kórsakov fue fiel a la tradición familiar y se enroló en la Marina Imperial tras concluir sus estudios en la Escuela Naval de San Petersburgo. Dejó la Armada para dedicarse de lleno a la música cuando tenía 29 años.
Para entonces ya había compuesto su primera sinfonía, piezas orquestales y la ópera "La Dama de Pskov" y enseñaba composición y orquestación en el Conservatorio de San Petersburgo, del que fue profesor durante casi 40 años. El periodo creativo más intenso de Rimsky-Kórsakov comenzó a mediados del los años 90 del siglo XIX, cuando compone las óperas Nochebuena y Sadko, entre otras.
A la ironía de la ópera de El zar Saltán, a la que pertenece la pieza El vuelo del moscardón, le sigue a comienzos del siglo XX las alegorías políticas del El gallo de oro, que era una crítica desvelada a la Rusia imperial y que fue prohibida desde su estreno. Ni con la muerte de Rimsky-Kórsakov, acaecida en la hacienda de Liubensk el 21 de junio de 1908, cuando el músico tenía 64 años, ni con la caída del zarismo, cesó la persecución política de su obra.
Tras la revolución bolchevique de 1917 muchas de sus composiciones pasaron a engrosar la listas de obras sospechosas y algunas fueron prohibidas, al igual que currió con parte de la música de Músorgski y Mijaíl Glinka, otro gran compositor ruso.
Babelia
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