La policía francesa recupera dos cuadros de Picasso robados en febrero en París

La policía francesa ha recuperado los dos cuadros de Pablo Picasso valorados en 50 millones de euros robados en febrero pasado de la residencia parisina de una de las nietas del artista malagueño, Diana Widmaier-Picasso, informa el diario galo Le Figaro en su edición en Internet. Junto a las dos pinturas fue sustraído un dibujo, también recuperado. Las obras fueron sacadas de sus marcos y enrolladas, pero se encuentran en buen estado, según las citadas fuentes, que aseguran que los autores del delito han sido detenidos.

El abogado de Diana Widmaier-Picasso, Paul Lombard, ha confirmado el éxito de la actuación policial y ha indicado que los agentes han detenido a dos personas, agregando que no sabe en qué momento serán devueltas a su clienta las obras recuperadas, que siempre han pertenecido a la familia del pintor.

El diario francés apunta que los investigadores, especializados en el robo de obras de arte, han localizado los cuadros en la vivienda de unos delincuentes que ya contaban con antecedentes en ese tipo de delitos.

Las dos pinturas de Picasso ahora recuperadas son un retrato de su hija Maya, madre a su vez de Diana, y otro de su esposa Jacqueline. Se trata de Maya à la poupée (1938), con unas dimensiones de 60 centímetros de ancho por 74 de alto, y de Portrait de Jacqueline (1961), de 170x150 centímetros.

La policía francesa contaba con poder recuperar esas obras ya que el hecho de que fueran de Picasso las convertía en difícilmente vendibles en el mercado del arte, dado que son muy conocidas y sería un riesgo para los ladrones. Las pinturas contaban con medidas de seguridad, que fueron burladas por los ladrones, quienes a su vez trabajaron de noche y con profesionalidad, ya que los inquilinos de la vivienda no se percataron de nada.

Picasso es uno de los artistas más codiciados por los ladrones y obras suyas han sido robadas en diferentes ocasiones y lugares. Otra de su nietas, Marina Picasso, sufrió la sustracción de una quincena de cuadros en su casa de Cannes (Francia). Fue el 5 de noviembre de 1989 y aparecieron cuatro días después. En 2004, una naturaleza muerta del artista español fue robada del museo Georges Pompidou, aunque tres meses más tarde fue encontrada.

El robo más importante en Francia de obras de Picasso se remonta a 1976, cuando fueron sustraídas 118 piezas del artista del Museo de Aviñón. Otros robos se han sucedido en Zúrich, Londres y Río de Janeiro en 1994, 1997 y 2006, respectivamente. En el primero desaparecieron casi veinte telas en una galería de arte, en el segundo un hombre se llevó la escultura Tète de Femme, que fue recuperada, y en el tercero fueron sustraídos cuatro cuadros.