'Peindre ou faire l'amour' y 'Sin City' hacen de Cannes la ciudad de todos los pecados
Ninguna de las dos logra los favores de la crítica
Cannes se ha convertido hoy en la ciudad de todos los pecados con la proyección de la película estadounidense Sin City, fiel adaptación del conocido cómic de Frank Miller, y de la francesa Peindre ou faire l'amour, una comedia algo vetusta en la que Arnaud y Jean-Marie Larrieu exploran los inconfesables deseos de una pareja. Pero ni la una ni la otra han convencido. La primera, a pesar de estar precedida por una gran campaña y de la expectación creada por la colaboración de Quentin Tarantino, ha sido acogida con un espeso silencio por la crítica. La segunda cinta, la última francesa a concurso, parece estar rodada hace 30 años.
Sin City, que posiblemente y tras su estreno comercial se convierta en un éxito de público, está basada en el negro cómic de Frank Miller que narra la historia de una ciudad infestada de criminales, policías y políticos corruptos y mujeres fatales. Sexo y violencia son los únicos elementos sobre los que gira, reiteradamente, la estructura de este filme que, sin embargo, hace gala de un aspecto estético y formal muy cuidado. Cine para adultos con alma de niños, el filme de Miller y Rodríguez utiliza las últimas técnicas del cine digital para narrar una historia maniquea de buenos y malos, de héroes y criminales que, a fuerza de repetir situaciones, termina por aburrir.
Sin City se hunde en las raíces de la cultura popular estadounidense y trata de imitar las novelas policíacas de las décadas de 1930 a 1950, pero sin la grandeza de los maestros de la pulp fiction. Los protagonistas de estas historias -son varias que se van encadenando- hacen su trabajo con notable eficacia, en especial Benicio del Toro, Jessica Alba, Bruce Willis, Mickey Rourke y Brittany Murphy. En un cómic, los trazos gráficos son exagerados, al igual que las emociones que intenta trasmitir. Para respetar ese estilo, el equipo de maquillaje del filme utilizó prótesis especiales bajo la supervisión de Greg Nicotero.
'Sin City', como 'Star Wars'
Desde el punto de vista técnico, Sin City fue filmado con las más modernas cámaras digitales, las mismas que usó George Lucas en el tercer episodio de Star Wars. Se rodó en vídeo digital de alta definición. Todos los monitores funcionaban en colores, excepto uno que lo hacía en blanco y negro. De esta manera, Rodríguez podía elegir lo mejor de estas dos modalidades.
Frank Miller, nacido en 1957, es un buen dibujante especializado en superhéroes como Elektra, la asesina ninja, o un Batman envejecido. Rodríguez nació en San Antonio (Tejas), de padres mexicanos. En 1991 rodó Bedhead, un cortometraje que obtuvo hasta 14 premios. El mariachi, el largometraje que lo lanzó a la fama, es de 1992. Desperado, protagonizado por Antonio Banderas y Salma Hayek, confirmó su fama en 1995. Después llegará su colaboración con Tarantino y otras cintas de variado interés como Spy Kids y The Adventures of Sharkboy and Lavagirl in 3D.
La cinta francesa, protagonizada por Sabine Azema, Daniel Auteil, Amira Casar y Sergi López, es una comedia tradicional sobre dos parejas que intercambian sus roles. Ni el asunto es novedoso ni tampoco es provocativa la forma en que está rodada la cinta, ya que prácticamente no se ve ninguna escena de sexo. El objetivo de los directores, pues, parece haber sido bastante teórico: mostrar si es posible una vida feliz después de 30 años de matrimonio. Tras el pase, los directores han manifestado que su intención fue mostrar la historia de una pareja sin miedo y sin reproches. Los hermanos Arnaud y Jean Marie Larrieu nacieron en Lourdes en 1965 y 1966, respectivamente, y éste es su segundo largometraje, tras Un homme un vrai. Previamente, habían rodado dos mediometrajes, La breche de Roland y Fin d'eté, y seis cortos.
Babelia
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