Los Oscar hacen historia al premiar el trabajo de tres actores negros

La victoria indiscutible de Una mente maravillosa, con cuatro Oscar (película, dirección, actriz de reparto y guión adaptado), ha ensombrecido los cuatro premios técnicos logrados por la más nominada, El señor de los anillos. Pero la gran noche del cine, que ha contado por primera vez con la presencia de Woody Allen, ha sido histórica para los actores de raza negra: un Oscar honorífico para Sidney Poitier, mejor actor para Denzel Washington y mejor actriz para Halle Berry.

Junto con Washington, premiado por Día de entrenamiento y que ya había recibido un Oscar como actor de reparto por Glory, una emocionadísima e incrédula Halle Bery ha marcado un hito en la historia de los mayores galardones del cine, al convertirse en la primera mujer negra premiada por un papel principal.

En el caso de Denzel Washington, su trabajo en Día de entrenamiento supone la segunda estatuilla en la historia para un actor negro en un papel principal, tras el logrado hace 30 largos años por el tercer actor afroamericano galardonado anoche, Sidney Poitier, al que se ha entregado un Oscar Honorífico, al igual que a Robert Redford.

"Un premio muy personal"

"Es algo mucho más personal que todo eso. Mucho hablar de razas pero lo que es", ha señalado Washington, mientras que Berry no ha podido ser tan precisa en sus declaraciones, presa de un ataque de llanto y bajo el peso de la estatuilla conseguida gracias a su trabajo por Monster's Ball.

"Es una noche que nunca creí posible, que valoren el mérito de nuestro trabajo y no el color de nuestra piel", ha declarado emocionada y deseosa de que su victoria sirva de recordatorio a las mujeres negras que abrieron camino en Hollywood.

La victoria de estos actores ha eclipsado al resto de los ganadores en esta 74 edición de los Oscar, en la que, siguiendo la tradición de Hollywood de premiar historias de superación personal con corte clásico, Una mente maravillosa se ha alzado con el premio a la mejor película, mejor director para Ron Howard, mejor actriz secundaria para Jennifer Connelly y mejor guión adaptado para Akiva Goldman. Russell Crowe, candidato por segundo año consecutivo, no ha logrado desbancar a Washington.

A pesar de la polémica generada por los detalles que pasa por alto -declaraciones antisemitas y su presunta homosexualidad-, Una mente maravillosa, basada en la biografía del genial y esquizofrénico matemático John Nash, se ha ganado la aceptación del público, con 150 millones de dólares en taquilla.

"Me siento como si fuera a hacer gimnasia esta noche", ha señalado un sonriente Howard con sus dos estatuillas en mano. "Se trata de un sueño que siempre he tenido", ha añadido este hijo de Hollywood, que nunca había ganado el reconocimiento de la Academia pese a comenzar de niño su carrera como actor y realizar algunas de las cintas más taquilleras.

Cuatro premios menores

El mismo número de premios ha recibido la película que tenía el mayor número de candidaturas (13), El señor de los anillos, pero su importancia ha sido mucho menor, ya que se trata de mejor fotografía, mejor banda sonora, mejor maquillaje y mejores efectos especiales, unos premios técnicos y considerados de consolación.

El Oscar al mejor actor secundario ha recaído, sorprendentemente, en el británico Jim Broadbent por Iris, cuando se esperaba que el mago Gandalf, interpretado por Ian McKellen, se hiciera con ese premio.

Otras dos películas, el musical Moulin Rouge, la gran derrotada, y Black Hawk derribado, se han repartido a partes iguales cuatro oscars, aunque la primera no ha podido ver a su protagonista y favorita de todas las quinielas, Nicole Kidman, recoger el premio a la mejor interpretación femenina.

Moulin Rouge ha ganado los premios al mejor vestuario y mejor dirección artística, mientras que Black Hawk derribado, dirigida por el británico Ridley Scott, se ha hecho con los oscars al mejor montaje y al mejor sonido.

La otra gran sorpresa de la noche ha sido En tierra de nadie, que ha conseguido el primer Oscar para la cinematografía bosnia, lo que ha puesto en fin a la pugna entre la francesa Amelie y a la argentina El hijo de la novia, francas favoritas.

Además, el compositor Randy Newman ha roto su racha de 15 intentos para lograr, en su decimosexta candidatura, el Oscar a la mejor canción por Monstruos S.A. aunque Shrek ha conseguido el Oscar de animación.