Dolor por la muerte del "escritor español más universal del siglo XX"

El escritor Francisco Umbral, galardonado con el Cervantes al igual que Cela, ha asegurado que la muerte de Cela supone la pérdida del último escritor de la Generación del 98. Umbral, visiblemente afectado a la puerta de la clínica Cemtro, ha criticado el "olvido" de Cela por parte de las nuevas generaciones de lectores. Umbral, que ha perdido "a un amigo y un maestro", ha destacado del fallecido "su singularidad y su voz inconfundible".

Igualmente conmocionado por la muerte de Cela se encontraba, a su paso por la clínica Cemtro, el académico y humorista Antonio Mingote: "La obra de Camilo es gigantesca. Tenemos que estar agradecidos y orgullosos de lo que nos ha dejado a todos, y que nos honra".

Manuel Vázquez Montalbán ha indicado que pasará a la historia por ser "una figura importante en la transición de lo que fue la cultura literaria española previa a la Guerra Civil y el inicio de cierta normalidad democrática en España a finales de los años 60". Montalbán ha destacado su figura y le ha definido como "un estilista notable" y "un almacenista de lenguaje extraordinario".

Juan Marsé ha declarado que Cela "fue un prosista singular y reiterativo, campanudo y descomedido". El escritor catalán ha añadido que "como novelista dejó de interesarme hace 50 años, en su primera época". Sin embargo, "como intelectual y hombre público", lo considera "un mal ejemplo".

Las palabras de Cela "estarán siempre, nos sobrevolarán y nos harán compañía", ha manifestado Juan Manuel de Prada, que ha descrito a Cela como "un hombre de maneras bruscas, impetuoso, que vivía la vocación literaria apasionadamente". Según De Prada, Cela "ha sido objeto de persecuciones en los últimos años" porque "España es un poco cainita".

El periodista, escritor, académico y consejero delegado del diario EL PAÍS, Juan Luis Cebrián, ha calificado al fallecido como "un prosista de fuerza formidable y una figura señera en nuestra cultura y nuestras letras". Cebrián ha explicado que conocía a Cela "desde hace muchos años" porque existía entre ellos, no sólo un "gran compañerismo en la Academia sino una relación de amistad,

familiar", sino también la relación que se da entre el autor y "un atento lector de su obra".

El periodista y académico Luis María Ansón ha asegurado que Cela ha marcado un "antes y un después" en la literatura con la publicación de La Colmena, que tuvo una "incidencia extraordinaria en las nuevas generaciones y en la forma de novelar". "Ha sido un creador de belleza, uno de los grandes escritores, no sólo del siglo XX, sino de todas las épocas", ha concluido.

El periodista y escritor Alfonso Ussía ha señalado, a su llegada a la Clínica Cemtro de Madrid, que Cela era un "hombre lleno de cortesía, sensibilidad y ternura". Ussía ha destacado la personalidad del fallecido, al que ha definido como "una persona profundamente educada y con un gran sentido de la amistad".

El periodista Antonio Burgos ha indicado que "se pierde a un gran creador del lenguaje", aunque ha asegurado que "siempre existirá la España de Cela". Para Burgos, del mismo modo que existe una "España de Velázquez, una Galicia de Valle-Inclán o un Madrid de Benito Pérez Galdós, siempre existirá una España de Cela".

El escritor Fernando Vizcaíno Casas ha lamentado la muerte de Cela, al que se ha referido como "un gran amigo desde hace muchos años" y al que ha definido como "el gran revulsivo de las letras españolas". "Es una gran pérdida para España y la cultura", ha añadido.

El poeta Luis Antonio de Villena ha subrayado la "indudable grandeza literaria" de Cela, un

escritor "de primerísima fila en sus obras de los años 40, 50 y 60", y un personaje público "controvertido, no simpático para todo el mundo".

José Manuel Caballero Bonald ha hecho hincapié en que los cambios "bruscos" en el carácter de Cela se han visto reflejados en su literatura, lo que "provocó que ahora tengamos una variada y copiosa obra de quien fue un gran maestro del idioma".

La escritora Esther Tusquets ha sentenciado que Cela "pasará, sin duda, a la historia de las letras por su literatura" y "su carácter no importará a nadie", a pesar de que a veces levantó polémica.

Angeles Caso le ha descrito como "un escritor representativo indiscutiblemente de la Literatura española" y, aunque ha elogiado el lenguaje del Premio Nobel, ha valorado aún más "el contenido de su obra, que estuvo al servicio de la condición humana".

La ministra de Cultura, Pilar del Castillo, ha asegurado en declaraciones a Radio Nacional que Cela ha sido el "escritor más universal del siglo XX en España", como muestra la "obra ingente de extraordinaria calidad" que ha dejado a los lectores del mundo.

Del Castillo ha glosado asimismo la gran "significación intelectual" de un autor de quien ha destacado especialmente su "libertad de pensamiento", que a veces fue "fruto de polémica". "No se ha sometido ni a modas ni a convenciones", ha añadido la ministra.

El secretario de Estado de Cultura, Luis Alberto de Cuenca, ha señalado que era "una figura señera, nuclear de la literatura española de todos los tiempos", un escritor "que ha mantenido la antorcha al nivel máximo durante muchas décadas". "Muchas veces hemos pensado como serían Cervantes, Lope y Calderón, nosotros hemos tenido la suerte y la inmensa fortuna de conocer a Cela", ha indicado.

El ministro portavoz del Gobierno, Pío Cabanillas, ha expresado en nombre del Ejecutivo su pésame por el fallecimiento, que supone la pérdida de "una de las grandes personalidades de la literatura universal en lengua hispana".

El portavoz del Grupo Socialista en el Congreso de los Diputados, Jesús Caldera, ha asegurado que la muerte de Cela es una pérdida para el patrimonio común de los españoles, pero ha recordado que su excelente obra guardará su recuerdo. "Por fortuna, nos queda su huella y su memoria en la excelente obra que alumbro a lo largo de su vida", ha subrayado.

José María Bris, alcalde de Guadalajara, ciudad que ha decretado tres días de luto por la muerte del escritor, ha asegurado que la "ciudad y la provincia pierden un profundo amigo", muy conocido por su libro Viaje a la Alcarria, que hizo célebre y universal a esta comarca.

El alcalde de Madrid, José María Alvarez del Manzano, ha señalado que estaba "especialmente dolorido" tras conocer la noticia. "Es un día de luto para la comunidad de Madrid no sólo porque ha muerto una persona de una capacidad intelectual extraordinaria, sino porque también poseía la Medalla de Oro de Madrid, y en sus escritos siempre hacía referencia a Madrid", ha explicado el regidor.

El coordinador general de IU, Gaspar Llamazares, ha expresado en nombre de su formación el pésame por la pérdida y ha asegurado que el novelista "seguirá viviendo en sus libros".

El portavoz de CiU en el Congreso de los Diputados, Xavier Trias, ha subrayado "el honor y la satisfacción" que supone para todos los españoles haber tenido en su patrimonio cultural a alguien como Cela, cuyas obras "permanecerán con nosotros siempre".

La nota discordante la ha puesto el portavoz del BNG en el Congreso, Francisco Rodríguez, que ha expresado el pesar de la formación nacionalista por la muerte del escritor, pero ha criticado su "talante mercantilista y su convivencia con el poder político en beneficio propio".

El director de la Real Academia de la Lengua, Víctor García de la Concha, ha lamentado el fallecimiento de quien ha descrito como una "figura capital de la cultura española". García de la Concha ha alabado las múltiples facetas artísticas de Cela, "poeta, novelista, lexicógrafo, ensayista, lingüista, hombre de totalidad de arte".

Por su parte, la presidenta de la Sociedad General de Autores y Editores, Ana Diosdado, y el presidente ejecutivo de la entidad, Eduardo Bautista, han lamentado la "irreparable pérdida para la cultura en lengua española" que supone la muerte de Camilo José Cela.

El premio Nobel y premio Cervantes era el socio número 3.383 de esta sociedad, en la que había ingresado el 17 de enero de 1949, hace exactamente 53 años, informa la SGAE.

El director de la Fundación Príncipe de Asturias, Graciano García, ha recordado "desde la tristeza" la "sabiduría y pasión" con la que Cela siempre actuó y que reflejó en las reuniones de los jurados de los que formó parte en Oviedo a la hora de fallar algunos premios de las Letras, galardón con el que había sido distinguido en 1987.

El rector de la Universidad Camilo José Cela, Felipe Segovia, ha dicho que tanto los alumnos como los profesores del centro están conmocionados por la muerte del Premio Nobel, y ha destacado de él que "vivió de manera intensa la vida universitaria y ha sido un ejemplo, porque representaba las tres dimensiones de que debe constar una Universidad: investigación, docencia y desarrollo de la cultura".

Por su parte, los obispos españoles, que realizan durante esta semana los Ejercicios Espirituales en una casa de las cercanías de Madrid, rezan por el escritor. El portavoz de la Conferencia, monseñor Juan José Asenjo ha afirmado: "Los obispos españoles sentimos muy de veras la muerte de don Camilo, uno de los grandes escritores del siglo XX".