Aemet advierte de la llegada el viernes de una nueva ola de calor a España
El episodio se extenderá, al menos, hasta el domingo y se espera que se superen de forma generalizada los 39 y 40 grados en gran parte de la Península
La Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) ha activado un nuevo aviso por ola de calor en España. Durará desde el viernes y hasta el domingo, aunque los expertos de este ente público no descartan que se pueda prologar también al lunes. La agencia ha explicado que se espera que las temperaturas, ya elevadas ahora, “continúen ascendiendo progresivamente en las próximas jornadas”. Lo peor se espera el sábado, cuando se prevé que se superen los 39 o 40 grados de forma generalizada en gran parte de la Península.
Según explica Aemet en el aviso especial que ha emitido este miércoles, “el viernes y el sábado se esperan ascensos generalizados” de las temperaturas. “Es probable que el viernes se superen los 39 grados en el medio Ebro, depresiones de Huesca y Lleida, valle del Guadalquivir, Granada y puntos del centro peninsular y valle del Duero, sin descartar que se alcancen también en el valle del Miño”. En los valles del Tajo y el Guadiana se llegará a los 40.
Pero lo más duro llegará el sábado. “Es probable que se superen los 39 o 40 grados de forma generalizada en los valles del Ebro, Duero, Tajo, Guadiana y Guadalquivir, así como en puntos del Miño; centro peninsular; oeste de la meseta Sur, y cuenca del Genil”. El noroeste tampoco se librará: “es probable que se superen los 34 grados en el oeste de Galicia”, advierte Aemet. “Y los 36 en el resto de la meseta norte, interior de Cataluña, norte de la Comunidad Valenciana y sur de Baleares”, añade.
El domingo los meteorólogos creen que comenzará a entrar una masa atlántica más fresca por el tercio occidental peninsular, aunque las temperaturas se mantendrán sin grandes cambios. Por ello, la agencia no descarta que continúe activo el aviso por ola de calor.
Se trata del cuarto aviso por ola de calor que activa Aemet desde el 18 de julio. Sin embargo, una vez revisados los datos de los últimos días, esta agencia entiende que hasta ahora se ha producido solo una ola de calor en España, aunque considerablemente extensa: “comenzó el día 23 y se extendió hasta, al menos, el final del mes”, se explica en el informe climático mensual correspondiente a julio que elabora Aemet.
🌡️Temperaturas muy altas durante los próximos días en buena parte de España.
— AEMET (@AEMET_Esp) August 6, 2024
Si comparamos el carácter térmico previsto para la masa de aire asentada sobre nuestro territorio con los registros de 1991 a 2020, será una de las más cálidas, incluso con valores de récord.
(1/2) pic.twitter.com/3uuSxIcgGP
Una ola de calor es un episodio de temperaturas anormalmente altas que se mantienen varios días y que afecta a una parte importante de una área geográfica, como un país. Pero no existen criterios concretos y unificados en todo el mundo para establecer una definición. Para Aemet, por ejemplo, una ola de calor se produce cuando durante al menos tres días consecutivos se registran máximas diarias por encima de la media de los meses de julio y agosto del periodo comprendido entre 1971 y 2000 en como mínimo el 10% de las estaciones que la agencia toma como referencia.
Los avisos de Aemet por olas de calor se basan en esas temperaturas que se salen de lo normal estadísticamente hablando. Pero también existe un sistema de alertas sanitarias, que tiene en cuenta las temperaturas a partir de las que se dispara de forma significativa la mortalidad en una zona concreta. Aunque durante esta semana no estaban activos los avisos por ola de calor de Aemet, en muchos municipios del país se ha estado en el nivel máximo de alerta sanitaria al superarse los umbrales de seguridad fijados por el Gobierno. En esta herramienta puede consultar en qué situación está su municipio.
En todo caso, las olas de calor son un buen indicador de lo que está ocurriendo en el planeta por un cambio climático causado por el ser humano debido a las emisiones de gases de efecto invernadero generadas, principalmente, con la quema de combustibles fósiles. Aemet realiza un seguimiento de las olas y a lo que apuntan los datos históricos que maneja es que estos episodios son cada vez sean más duraderos ―aumentando a un ritmo de tres días por década—, más extensos —en promedio, afectan a tres provincias más cada 10 años— y más intensos —0,27 grados Celsius más cálidos cada década—.
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