Aviones, coches y metro: los 2.000 millones en obras que cambiarán el transporte y la economía de Madrid
La ampliación del aeropuerto de Barajas, la expansión del metro y la creación del bus-VAO de la A-2 abren una nueva etapa de inversión en infraestructuras tras la crisis económica
Tras superar por primera vez a Cataluña como la comunidad con más PIB de España —230.794 millones de euros en 2018, según datos del INE—, Madrid afronta un lustro crítico para sus infraestructuras de transporte. Las grúas, las tuneladoras y el cemento volverán a operar a pleno rendimiento en la región para lubricar la economía favoreciendo la llegada de viajeros —con la ampliación del aeropuerto de Barajas—; la movilidad en la región —con dos ampliaciones de la red de Metro—; y la entrada en la capital —con el bus-VAO de la A-2—. En total, el Gobierno central, el regional y el municipal gastarán —en distintas proporciones— más de 2.000 millones. Desde el inicio de la crisis económica, transformada en durísimos recortes, no había habido un esfuerzo inversor similar.
"Esta es la resaca de la crisis, cuando todo se paralizó, también proyectos necesarios, que se quedaron guardados en un cajón mientras se dilapidaba el dinero en obras innecesarias", opina Álvaro F. Heredia, experto en movilidad que gestionó la EMT durante el mandato de Manuela Carmena como alcaldesa de la capital. "Entonces se apostó por las radiales, que ha habido que rescatar, por los metros ligeros, que tienen los billetes subvencionados al 90%, cuando se podía haber hecho esto antes: cubren necesidades reales, no como aquellas otras", añade. "Lo más crucial de todo son los bus-VAO".
"En Madrid hubo una época en la que se priorizó el rédito electoral frente a la utilidad, y casualmente ahora llegan las obras que pedía el consorcio de transportes", amplía Adrián Fernández, portavoz de movilidad de Greenpeace, en referencia a los Gobiernos de Alberto Ruiz-Gallardón y Esperanza Aguirre. "Con la ampliación del metro se atienden muchas necesidades; el bus-VAO llega tardísimo, y es de esperar que tras él se haga en todas las entradas a Madrid; y en el aeropuerto se hace una inversión multimillonaria que no supone un aumento estratosférico de capacidad y que redunda en más emisiones y contaminación", añade.
1.500 millones para ampliar el aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas. El proyecto, incluido en el Documento de Ordenación y Regulación Aeroportuaria para 2022-2026, unificará las actuales terminales 1, 2 y 3 y ampliará la T4 y su satélite para elevar el número potencial de pasajeros de 70 a 80 millones. El objetivo es adaptar la estructura a los vuelos internacionales, que emplean naves de mayor tamaño y ya representan más del 70% del tráfico comercial de Barajas.
La inversión total prevista ronda los 1.500 millones de euros. Ya se han dado los primeros pasos administrativos: Aena y el Canal de Isabel II acaban de firmar un convenio valorado en más de 25 millones de euros para ejecutar los proyectos de acometidas de agua que se necesitarán para abastecer la ampliación. Los cambios afectan a una pieza clave de la economía madrileña. Así, la actividad del aeropuerto representa el 9,3% del PIB regional, según datos publicados en 2018 por el Ministerio de Fomento, y genera la producción directa e indirecta de casi 40.000 millones de euros, un cuarto de ellos en la capital.
500 millones para que el Metro vuelva a crecer. El Gobierno regional acometerá a lo largo de la legislatura —hasta 2023— el inicio de la ampliación de la línea 3 —2,5 kilómetros con una inversión de 105 millones— y de la línea 11 —6,5 kilómetros con un coste de 410 millones—.
La primera ampliación beneficiará a los más 1,1 millones de habitantes de Getafe, Alcorcón, Móstoles, Fuenlabrada o Leganés. La segunda supondrá un incremento casi 28.900 personas al día en jornadas laborables en la red del suburbano y contribuirá a descargar la línea 6. Además, también se ha avanzado la prolongación de la línea 5 hasta el aeropuerto, aún sin calendario.
13 millones para el primer bus-VAO desde 1994. El Gobierno de la nación, el de la Comunidad y el del Ayuntamiento cofinanciarán los 13 millones que costará esta infraestructura de 20 kilómetros en la A-2, aliviando el tráfico en uno de los principales pulmones económicos de la región, el corredor del Henares. Allí están algunas de las grandes empresas de logística radicadas en Madrid, como Amazon. El objetivo es permitir el uso exclusivo del carril izquierdo, en ambos sentidos, para autobuses y vehículos con alta ocupación en hora punta.
Los 155.000 conductores que utilizan cada día esta vía contarán —previsiblemente a inicios de 2021— con sistemas inteligentes que podrían ahorrarles hasta un millón de horas de atascos al año, lo que supondría un ahorro de unos 20 millones de euros. El Gobierno regional, además, quiere poner en marcha los bus-VAO en la A-3, la A-5 y la A-42. No se había construido ninguno desde el primero que se hizo, allá por 1994, en la A-6.
¿Una circunvalación solo para autobuses públicos?
Un proyecto clave de infraestructura de transportes permanece a la espera de que alguien lo active en los despachos del Ayuntamiento. El Gobierno de Manuela Carmena (2015-2019) empezó a configurar el trazado de un espacio reservado por autobuses públicos, que denominó como M-35, con plataformas reservadas a estos vehículos que conectarán a nueve distritos exteriores a la M-30, y con el que se mejoraría, aseguraron fuentes conocedoras del plan, también la velocidad para los interurbanos.
Lo que sí hará el nuevo Gobierno municipal, dirigido por José Luis Martínez Almeida, es construir un nuevo aparcamiento subterráneo de carácter mixto para residentes y con plazas de rotación en la calle Menéndez Pelayo, que conecta las calles Príncipe de Vergara y la Avenida del Mediterráneo alrededor del Retiro.
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