Agentes de cambio
La Zona Verde de la COP25, el Thyssen o La Casa Encendida se llenan de actividades alrededor de la Cumbre del Clima, incluyendo conciertos de grupos como Hinds
En la Cumbre del Clima, la COP25, también hay espacio para exposiciones, proyecciones y conciertos. En la Zona Verde en Ifema, abierta a toda la ciudadanía, hay un escenario por el que esta semana han pasado grupos como Hinds. Después de tocar en los mejores festivales del mundo, de Glastonbury a Coachella, las madrileñas tienen casi listo un nuevo disco. Ellas creen en la música como agente de cambio. “Nuestra mayor misión es hacer de la revolución algo irresistible”, en palabras de Carlotta Cosials, vocalista y guitarrista de la banda.Concienciadas en la lucha contra el cambio climático, las cuatro admiran a Greta Thunberg. “Es una heroína”.
Movimiento perpetuo. “Todo el mundo tiene que saber lo que está pasando y lo que está pasando es que nos vamos a la mierda. Mucha gente no lo sabe. Debemos meter presión para que los políticos realmente cambien las cosas”, decía Ana Perrote, la otra vocalista de Hinds, al acabar el concierto acústico el jueves en el centro de la Zona Verde de la COP25. Era la primera vez que tocaban en público Riding Solo, su nuevo single. “Va sobre nosotras, sobre estar en movimiento perpetuo, sobre estar en todas partes y al mismo tiempo en ninguna, sobre estar rodeadas de extraños la mayor parte del día o a 9 horas de diferencia de nuestra gente y del que llamamos nuestro hogar”. Pese a los cantos de sirena, ellas quieren seguir viviendo en Madrid. “Es la mejor ciudad del mundo”. El videoclip, que acaban de presentar, lo grabaron en una cantera abandonada cerca del Parque Warner.
Entre stands. Soleá Morente, Cariño y Club del Río, entre otros grupos, también han pisado esta semana el escenario programado por Radio 3. Carolina Durante, Manel, Rodrigo Cuevas o Amaral lo harán la semana que viene. Para acceder a la Zona Verde solo hay que registrarse a través de la web de Ifema. En los diversos stands lo mismo se puede ver un corto sobre economía circular que curiosear un mapa interactivo que permite descubrir la calidad del aire que se respira en cualquier calle de Madrid. Lo mismo se puede ver una exposición organizada por la edición brasileña de Vogue que ponerse unas gafas de realidad virtual y descubrir la propuesta Open Future Creative Communion. En el Ágora continuamente hay encuentros sugestivos como ‘Hacia una sociedad sin residuos’, ‘Acciones locales por el clima’ o ‘Cambiar la economía para frenar el cambio climático’.
Cúpulas geodésicas. En el patio circular del edificio central de la Feria de Madrid se encuentra la instalación Pollution Poods, del artista Michael Pinsky. En ella se recrean los niveles de polución existentes en Nueva Delhi, Beijing o São Paulo. Una serie de cúpulas geodésicas interconectadas permiten experimentar las diferencias entre unas y otras. A través de aromas artificiales se simulan las partículas de dióxido de nitrógeno, azufre y monóxido de carbono que tienen cada una de las ciudades. Una contaminación que provoca cada año 7 millones de muertes prematuras, según Naciones Unidas. El aire de la instalación no es tóxico. Su exterior escultural, de piel transparente, antes de llegar a Madrid ha estado en la londinense Somerset House o en la Plaza de las Naciones de Ginebra.
Acción inmediata. Ana Perrote de Hinds participa junto a Jon Kortajarena, Fernando Guallar, Marta Hazas, Alfonso Bassave, Silvia Marty o Brisa Fenoy en un vídeo al hilo de la COP25 que estos días se ha difundido por redes sociales promovido por el colectivo Extinction Rebellion. “Más de la mitad de especies animales que conocemos está en peligro de extinción total”, “En 2050 el 75% de España será un desierto”, “Nunca antes había subido tanto la temperatura global en tan poco tiempo” son algunas de las frases que dicen. “Nos rebelamos para reclamar acción inmediata. Lanzamos un ultimátum por la vida, un ultimátum por nuestras vidas”. Extinction Rebellion surgió en Reino Unido y se ha ido extendiendo por numerosos países, conformando una red coordinada internacionalmente. Hace unos meses Radiohead donó a la organización los beneficios de distintas grabaciones suyas.
Mundo en llamas. La fundación TBA21, de Francesca Thyssen-Bornemisza, se suma a la COP25 con una impactante obra de John Gerrard instalada en el patio del Thyssen-Bornemisza. Se trata de Western Flag, una bandera a la que dan forma hileras de humo negro. Para el artista es un símbolo del voraz consumo de energía y del hiperacelerado orden económico mundial así como un recordatorio de la continua agresión ambiental. “Un objeto de carbono para un mundo en llamas”, resume. El lugar en el que ubica la pieza (Spindletop, Texas) es donde se erigió el primer yacimiento petrolífero. “Pienso que es responsabilidad de TBA21 enarbolar la bandera de la huella de carbono cero. Debemos exigir una regulación inmediata y vinculante de las emisiones de CO2”, manifestó la fundadora y presidenta de TBA21 en su presentación. La hiperrealista obra, que cambia continuamente, está expuesta las 24 horas en el patio del museo hasta el 13 de diciembre.
Problemas urgentes. La Casa Encendida, donde ayer estuvo Greta Thunberg, también se suma a la Cumbre el Clima con cine, coloquios y una exposición. Desde su apertura, el centro cultural y social de la Ronda de Valencia ha estado comprometido con el medio ambiente. Coincidiendo con la COP25, en su Auditorio se proyectan películas sobre el cambio climático con entrada libre hasta completar aforo. El martes 10 se podrá ver el documental Time to Choose, de Charles Ferguson, ganador del Oscar por Inside Job, y el miércoles 11 The Great Green Wall, producida por Fernando Meirelles, con la Gran Muralla Verde de África como protagonista. Tras las proyecciones, habrá debates con voces autorizadas en la materia. La exposición Planeta Tierra. Nuestros grandes desafíos plantea problemas medioambientales que urge afrontar. Los datos sobre la disminución de la capa de ozono, sobre el aumento del dióxido de carbono en la atmósfera y sobre la cantidad de productos tóxicos vertidos a la biosfera exigen soluciones inmediatas. En la muestra se plantean algunas.
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