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El Govern eleva sus exigencias e insiste en una negociación que tenga ámbito nacional

Esquerra y Junts per Catalunya difieren sobre el orden del día de la reunión para permitir la tramitación de los Presupuestos

La consejera de Presidencia y portavoz del Govern, Elsa Artadi, en el Parlament.
La consejera de Presidencia y portavoz del Govern, Elsa Artadi, en el Parlament.MARTA PÉREZ (EFE)

La aceptación por parte del Gobierno central de la figura de un “relator” en la mesa catalana de partidos dista de satisfacer al independentismo. El Gobierno catalán, pese a reconocer “avances” en el diálogo con Madrid puso ayer el foco en su exigencia inicial de que la mesa de diálogo incluya también a formaciones de ámbito nacional, lo que pone en otro aprieto al Ejecutivo de Pedro Sánchez. “Se está lejos de llegar a un acuerdo”, resumió la portavoz del Govern Elsa Artadi quien por la tarde mantuvo una reunión telemática con la vicepresidenta Carmen Calvo.

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La petición de la Generalitat ejemplifica hasta qué punto son difusos tanto el alcance del diálogo como los acuerdos que se publicitan entre los ejecutivos de Pedro Sánchez y el de Quim Torra. Y más si se tiene en cuenta que en el trasfondo de la mesa de partidos lo que se está en juego a corto plazo no es tanto el conflicto político provocado por el procés como si el independentismo permite o no la tramitación de los Presupuestos Generales del Estado el miércoles de la próxima semana.

El Gobierno siempre ha dado por sentado que la cuestión catalana debe encauzarse en la Comisión Bilateral Estado Generalitat en su parte institucional. Y el ámbito político, defiende, debe tratarse en una mesa de partidos pero exclusivamente de ámbito catalán. La Generalitat no acepta esta segunda parte. Ellos quieren elevar el debate a una comisión a la que puedan sumarse partidos nacionales, singularmente Podemos. Y es en esta comisión donde quieren que se siente el relator, la figura notarial que, insisten, debe dar fe de los acuerdos alcanzados. Pese a los desacuerdos la vicepresidenta Carmen Calvo se emplazó ayer con Elsa Artadi a mantener abierto el diálogo en una reunión por videoconferencia celebrada a media tarde.

Para Artadi, la incorporación de un relator es necesaria para evitar que el diálogo sobre Cataluña embarranque constantemente por las diferentes interpretaciones que se hacen de los acuerdos. “Debe haber alguien que dé fe y pueda explicar lo que se acuerda. Si no, seguiremos estando como estamos, que unos dicen una cosa y otros la otra, y pasa una tercera”, defendió ayer. La portavoz del Govern insiste en que la presencia de Podemos en la mesa es importante porque el PSOE “no tiene fuerza suficiente” en el Congreso, y al preguntársele por el perfil de un posible relator, cree que debe ser alguien que puedan validar todos los presentes aunque “es más fácil encontrar una figura neutral a nivel internacional que a nivel español”.

Otro debate es si en la mesa los socialistas deben estar representados por el PSOE o por su referente en Cataluña, el PSC. La Generalitat no tiene preferencias en este aspecto.

Pero entre los muchos cabos sueltos pendientes está el de saber qué asuntos concretos se pueden abordar en esta mesa de partidos, aparte de la reivindicación constante de la Generalitat de debatir sobre el derecho a decidir. El independentismo cree que también se puede hablar de la propuesta de un nuevo Estatut pero no se puede excluir una opción, la del referéndum, que tiene el apoyo de un 47% de la Cámara. Con todo, a nadie se le escapa que la premura de saber qué pasará con la tramitación de los Presupuestos Generales del Estado (PGE). ERC ya presentó una enmienda a la totalidad y el PDeCAT seguramente lo hará. En caso de que no haya acuerdo, dijo Artadi, no se romperán las negociaciones pero sí aseguró que los independentistas no podrán aprobar los PGE.

La mesa de partidos planeó en el pleno del Parlament en el que el presidente Quim Torra mantuvo un agrio choque con la líder de Ciudadanos por las 21 exigencias que la Generalitat trasladó al Gobierno el pasado diciembre y que Inés Arrimadas calificó de “infamia”. Ciudadanos pidió ayer mismo la comparecencia del president para que explique su contenido. Torra por su parte le afeó a la líder de la oposición que no quiera asistir a la mesa de negociación de partidos catalanes. Arrimadas cree que Torra crea esos foros para “vaciar el Parlament”.

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