_
_
_
_
_

El Círculo de Economía pide un nuevo Estatut con rango de “norma constitucional”

El 'lobby' reclama a las fuerzas independentistas un regreso "absoluto" a la legalidad

Lluís Pellicer
El presidente del Círculo de Economía, Juan José Brugera.
El presidente del Círculo de Economía, Juan José Brugera.Toni Albir (Efe)

El influyente lobby económico y empresarial del Círculo de Economía ha instado a los partidos políticos a romper el bloqueo por el que atraviesan las instituciones españolas y catalanas. Y para ello, ha plasmado en un documento una batería de propuestas que pasan por que las fuerzas del Parlament vuelvan al “absoluto respeto a la legalidad” y recompongan el consenso interno. Además, reclama a las formaciones con representación en el Congreso hallen las vías legales para dar salida a las “aspiraciones” catalanas con la “elevación” del Estatuto “al rango de norma constitucional”. La institución, en la que están las grandes corporaciones catalanas, exigen el blindaje de competencias de como lengua, educación, cultura, ordenación territorial o financiación.

Más información
Los empresarios catalanes trasladan al Rey su preocupación por la crisis política
El Círculo de Economía pide a los partidos que cumplan la ley para frenar el “descalabro económico”

A las puertas de la XXXIV Reunión del Círculo de Economía, que tendrá lugar a partir del jueves en Sitges, la institución ha emitido un documento de nueve páginas bajo el título Propuestas para mejorar el autogobierno de Cataluña y el funcionamiento del modelo territorial del Estado. En el texto, los empresarios expresan su preocupación por el llamado “problema catalán” y la sentencia del caso Gürtel, que a su juicio puede llevar a una “dinámica” que aboque a España a un “adelanto electoral”. Sin embargo, el texto del Círculo se detiene en propuestas específicas para Cataluña. En su opinión, la situación que atraviesa la comunidad dejó de ser un conflicto solo con el Estado para convertirse en un “problema interno de la sociedad catalana” que se traduce en una “fractura civil” y una “polarización” que impide la gobernabilidad, una vida empresarial “ordenada” y dificulta la convivencia.

El Círculo insta a las formaciones independentistas a volver a la legalidad y al conjunto de partidos encontrar “las vías legales” para “encauzar” las “legítimas aspiraciones y preferencias de la población”. La institución que preside Juan José Brugera critica que solo se haya dado respuesta al conflicto catalán a través de la “legalidad vigente”, lo cual ha provocado que se haya “encauzado por la vía judicial”, que considera “claramente inadecuada para resolver” un problema político. Por ello, el Círculo pone como primera tarea al próximo Gobierno catalán que recupere la seguridad jurídica, la confianza empresarial y la convivencia cívica. El mejor indicador de éxito, razona la institución, será el regreso de las más de 4.000 empresas que han movido su sede social por el procés. Los efectos de esas decisiones, según la entidad, todavía no han impactado en la economía catalana, pero pueden hacerlo a medio plazo.

Recuperar la "regla" de los dos tercios

La segunda prioridad del Ejecutivo de Quim Torra, añade el documento, debe ser alcanzar un pacto interno entre todas las fuerzas del Parlament “para la convivencia y el buen funcionamiento de la vida política y administrativa”. Y añaden otro elemento: recuperar la regla de los dos tercios para modificar leyes que redefinan el marco de convivencia, en referencia a las normas del referéndum y ruptura que se aprobaron los pasados 6 y 7 de septiembre de 2017, que se sacaron adelante con mayoría absoluta. “Es irrenunciable recuperar esa regla”, expone el Círculo. El resultado de ese pacto debería ser un nuevo Estatuto “cuya naturaleza debe ser la de una verdadera constitución catalana dentro del marco de la Constitución española”.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Ese nuevo Estatuto debería permitir, de acuerdo con el documento, superar la “anomalía” de tener vigente una carta que no ha sido refrendada por sus ciudadanos, puesto que fue recortada por el Constitucional con posterioridad. La norma daría a una “amplia mayoría de ciudadanos” (“alrededor de dos tercios”) respuesta a su demanda de votar sobre el futuro de Cataluña. “Sin responder a esta demanda de consulta el problema político catalán permanecerá empantanado”, sostiene el documento. Y por último, permitiría el reconocimiento de Cataluña como “comunidad nacional”, con “fuertes elementos culturales y políticos propios”.

Por ello, el Círculo reclama que el Estatuto dé a la Generalitat el blindaje de competencias en materia de lengua, educación, cultura, funcionamiento interno del autogobierno en todos los ámbitos competenciales que le son exclusivos, la ordenación territorial, la administración pública y la financiación. Es decir, el Estatuto debería ser “la norma suprema del autogobierno interno” de Cataluña que, añade, no requeriría de ninguna consulta al resto de los españoles.

La institución pide a los partidos que ejecuten las reformas constitucionales necesarias para mejorar el “funcionamiento territorial”, que “perfeccione” el actual “reparto de competencias” y fije mecanismos para una mayor “lealtad institucional”. Por último, reclama una reforma del modelo de financiación que incorpore a las comunidades forales a los mecanismos de solidaridad, redefina la capacidad normativa, de gestión y recaudación e implemente mecanismos de coordinación fiscal.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Sobre la firma

Lluís Pellicer
Es jefe de sección de Nacional de EL PAÍS. Antes fue jefe de Economía, corresponsal en Bruselas y redactor en Barcelona. Ha cubierto la crisis inmobiliaria de 2008, las reuniones del BCE y las cumbres del FMI. Licenciado en Periodismo por la Universitat Autònoma de Barcelona, ha cursado el programa de desarrollo directivo de IESE.

Más información

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_