Sijena expondrá las piezas entregadas por Cataluña a partir del 23F

Dentro de menos de dos semanas, el próximo 23 de febrero, volverá a abrir al público la sala del monasterio de Sijena para mostrar todas las obras entregadas por Cataluña. Las 51 que volvieron en julio de 2016, y las 44 que volvieron el pasado 11 de diciembre, después de que un juez de Huesca diera permiso a la guardia civil y a los técnicos del gobierno de Aragón a entrar en el Museo de Lleida y embalar y llevarse hasta el cenobio oscense las piezas en virtud de la ejecución de la sentencia provisional dictada en 2015. Así lo anunció este viernes la consejera de Educación, Cultura y Deporte, Mayte Pérez, durante el pleno del gobierno aragonés. Entre las piezas expuestas estará la 'famosa' Inmaculada que fue entregada recientemente al no estar localizada hasta después de la acción del pasado 11 de diciembre.

Según la consejera Pérez, "el Ejecutivo autonómico ya está en condiciones de mostrar las 44 piezas últimas, entre las que figuran la caja sepulcral de Isabel de Aragón, el retablo de la Piedad, o el cuadro del Martirio de San Pedro, entre otros", aunque no entró a especificar el estado de muchas de las obras, sobre todo de la mayoría de alabastros que se conservaban en el Museo de Lleida y que desde esta institución desaconsejaron que viajaran por su fragilidad ya que fueron pasto de las llamas que quemaron el monasterio en la guerra civil que acabó convirtiéndolos en yeso.

Tampoco aclaró la consejera si se expondrá todas las obras o una selección de las mismas, ya que por las dimensiones de la sala (el antiguo dormitorio de las monjas), museográficamente sería imposible exponerlas todas. Seguramente se optará por mostrar unas cuantas (entre las que estarán las siete que se exponían de forma permanente en el museo de Lleida) y el resto guardarlas en vitrinas cerradas o armarios para mantener las condiciones optimas de exposición.

La apertura de las salas coincide con la primera actuación judicial contraria a los intereses del Ayuntamiento de Sijena y el gobierno de Aragón que tiene que ver con el otro pleito que está abierto con la comunidad de Cataluña relativa a las pinturas murales de la sala capitular (contigua a la que expondrá los objetos a partir del 23F). El pasado 25 enero la juez suspendió la ejecución de la sentencia que obligaba a devolver las pinturas ante la fragilidad de las mismas (basándose en los informes que le había hecho llegar el MNAC en este sentido) y, sobre todo, por el hecho de que el Gobierno de Aragón no hubiera probado que la sala reunía las condiciones de climatización adecuadas para la buena conservación de los murales tras su devolución (pese a lo que se dijo en enero de 2017 y sigue manteniendo el gobierno de Aragón que dice que cuenta con mejores instalaciones incluso que el propio MNAC que alberga la mejor colección de pintura mural del mundo).

Este asunto le valió este viernes a la consejera que la oposición cargara contra el gobierno de Aragón que preside Javier Lambán al que acusó de "no haber hecho nada en el último año y medio en el monasterio" y de "haber dejado en evidencia la capacidad gestora de Lambán,y su pulso político". La consejera se defendió diciendo que en los últimos años se ha invertido un millón de euros en el monasterio. Pérez volvió a insistir, aunque en el proyecto llevado a cabo no lo contemplaba "que la sala capitular está perfectamente habilitada. Lo que hemos hecho ha sido encargar un sistema mucho mejor y vanguardista mediante el que soterramos las torres para que haya un menor impacto visual".

La consejera también confirmó que se ha encargado un plan director a los arquitectos Pemán y Franco (que han llevado a cabo las labores de rehabilitación de los últimos años) "que en pocos días nos entregarán para dar una visión integral de esta gran joya que tenemos como es el Monasterio de Sijena", algo que la oposición del PP reclamó "sin ningún tipo de retraso ni excusa" ya que, según el PP "el resto del monasterio no existe para el gobierno de Lambán".

Este viernes también se supo que el Ayuntamiento tiene previsto reunirse con las inquilinas del monasterio (las monjas de la orden de Belén), con la intención que que colaboren de cara a 2023 cuando está previsto celebrar el centenario de la declaración como bien cultural del edificio. Son ellas, pese a que están realquiladas en el monasterio, las que llevan a cabo la apertura del edificio, una actividad que viene marcada por sus rezos y sus actividades diarias.