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Cataluña reduce un 20% las demoras para pruebas y visitas al especialista

La lista de espera quirúrgica se reduce un 0,62% en un año

Jessica Mouzo
Intervención en un quirófano de Barcelona
Intervención en un quirófano de BarcelonaCarles Ribas

La sanidad catalana cerró el 2017 con una reducción de la listas de espera. Las demoras para pruebas diagnósticas o consultas externas se redujeron alrededor del 20% en un año. Pero la mejora está aún lejos de los objetivos marcados por el Departamento de Salud en el plan de choque iniciado el año pasado para reducir las esperas. A falta de dos meses para finalizar las medidas de contingencia, Salud redujo la lista quirúrgica un 0,62%. La promesa, no obstante, es bajarla un 10%.

Tras años de listas de espera al alza a causa de los sucesivos recortes del gobierno de Artur Mas y con serios altibajos durante el breve mandato de Carles Puigdemont, el sistema sanitario empieza a apuntalar los tiempos de espera más asequibles del último lustro. Salud redujo un 20,7% las personas en espera para visitar al especialista (a diciembre de 2017 había 421.841) y un 22,5% los pacientes que aguardan una prueba diagnóstica (105.290 a finales del año). La lista de espera quirúrgica se redujo en 1.000 personas.

Estas mejoras se deben, en buena medida, al plan de choque que puso en marcha el exconsejero de Salud, Toni Comín, para mejorar la accesibilidad al sistema sanitario. Salud invirtió unos 57 millones de euros hace un año para reforzar los equipos y abrir quirófanos que drenasen las dilatadas listas de espera. El objetivo era reducir, en un año, un 10% las personas en lista de espera quirúrgica y un 50% los tiempos de espera para pruebas diagnósticas y consultas externas.

“Buena inercia”

Procedimientos que no remontan

Pese a las mejoras logradas, Salud no remonta los retrasos, por ejemplo, en las visitas al alergólogo (la espera media es de 214 días). “Los alergólogos hospitalarios se dedican a alergias complejas y tenemos alergias simples pendientes de visitar”, apunta Nadal. Y agrega: “Estamos formando a pediatras y médicos de familia para que estas alergias simples se despachen desde atención primaria”.

Tampoco mejoran en pruebas como las polisomnografías —el tiempo de espera pasó de 102 días en 2016 a 118 en 2017— y las ergometrías —de 98 días a 116—. Nadal achaca estas cifras a “cuestiones técnicas en los registros”, como que, a veces, las ergometrías (pruebas de esfuerzo) se hacen en el propio servicio de cardiología tras la visita y no constan ni entran en la lista de espera.

Pese a la mejora de los resultados, queda en el aire si Salud podrá cumplir los objetivos del plan de contingencia. A dos meses de que finalice la inversión extraordinaria, el Departamento solo ha logrado rebajar un 25% el tiempo de espera para visitar al especialista —de 152 días de media a 114— y un 21% las demoras para pruebas diagnósticas —de 85 días a 67. “Ahora nos damos cuenta de que el plan de choque era ambicioso, pero llevamos una buena inercia”, explicó ayer Cristina Nadal, directora del Área de Atención Sanitaria del Departamento.

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Además, la reducción de pacientes y tiempos de espera en pruebas médicas y visitas al especialista ha engrosado la lista quirúrgica. La indicación de una operación la realiza un especialista tras una consulta o después de someter al paciente a una prueba médica, de ahí que las personas que salen de la lista de consultas externas o pruebas diagnósticas se absorban en la lista de espera quirúrgica. Así, a diciembre de 2017, 163.809 personas aguardaban para someterse a una intervención, apenas un 0,62% menos que el año anterior.

Con todo, Salud ha reducido la lista de espera en casi todas las intervenciones. Las operaciones de oncología y cirugía cardíaca cumplen, de nuevo, al 100% los tiempos máximos de espera de 45 días estipulados por ley. Para operarse de cataratas y prótesis de cadera y rodilla (con un tiempo máximo de garantía de seis meses), hay 29.100 personas en espera y, de ellas, solo 964 superan el término marcado por la normativa (el año pasado eran 2.458 pacientes). Donde sí ha habido un incremento del 0,17% es en la lista de espera para intervenciones con un plazo máximo de referencia de un año: 132.853 pacientes aguardaban, a diciembre de 2017, para someterse a una operación de este tipo.

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Sobre la firma

Jessica Mouzo
Jessica Mouzo es redactora de sanidad en EL PAÍS. Es licenciada en Periodismo por la Universidade de Santiago de Compostela y Máster de Periodismo BCN-NY de la Universitat de Barcelona.

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