Los valencianos exigen una financiación per cápita igual a la media

La Comunidad Valenciana será, cuando acabe 2017, la autonomía peor financiada de España y seguirá a la cola en financiación per cápita, según datos de la Generalitat. La situación no es nueva y ha sido el hartazgo el que ha movido a sindicatos, empresarios, partidos políticos -a excepción del PP- y entidades cívicas a manifestarse este sábado en Valencia para exigir una financiación justa para los valencianos.

El presidente de la Generalitat Valenciana, Ximo Puig, ha cifrado en 16.000 millones de euros la insuficiencia financiera en el conjunto del sistema autonómico, ha declarado a la SER. "Recibimos un 12% menos de financiación que la media de las comunidades del régimen general -si se excluye Navarra y Euskadi-", ha apuntado Puig. "No queremos ser más que nadie, pero tampoco menos que nadie", es la frase más repetida por el Gobierno valenciano cuando habla de financiación. 

El sistema de financiación autonómica, aprobado en 2009, debía recalcularse o reformarse después de 2014, según ha defendido el Gobierno valenciano. Sin embargo, el Ministerio de Hacienda, a pesar de que ha creado una comisión de expertos, no ha abierto todavía el proceso de negociación y la Comunidad Valenciana, una de las peor tratadas en el sistema, lo necesita para acercarse a la renta media per cápita española.

Pocos discuten que los valencianos están entre los peor tratados por el sistema de financiación autonómica en vigor, de ahí que el Gobierno de Puig haya convertido este asunto en el caballo de batalla de la legislatura. El sentimiento de agravio se ha acrecentado por la "infrainversión" del Gobierno español en el territorio valenciano.

En vísperas de la manifestación, la vicepresidenta y portavoz del Consell, Mónica Oltra, espera que "miles de personas" se sumen a la marcha, que sea una demostración de unidad y "aparquemos los intereses partidistas". Según los convocantes de la marcha, los sindicatos CC OO y UGT y la patronal CEV, la manifestación cuenta con cerca de 7.000 adhesiones a título individual  y 280 entidades.

Los sindicatos UGT y CC OO y la patronal CEV portan la batuta de la marcha, cuya pancarta de cabecera solo llevará el lema El poble valencià exigeix un finançament just, sin más símbolos ni banderas. Abriendo la marcha estarán los representantes de las organizaciones convocantes, así como los de cuatro grandes plataformas ciudadanas -educación, sanidad, Consejo de la Juventud y la Coordinadora de ONG-.

La necesidad de unidad -Ciudadanos accedió finalmente a sumarse a la macha, no así el PP valenciano, que ha suscrito el manifiesto de la marcha pero no estará en la manifestación-, ha llevado a los organizadores a aclarar que "no serán bienvenidos lemas que vengan a distorsionar el mensaje de unidad", ha dicho el secretario general de CC OO-PV, Arturo León.

Los organizadores han dado libertad a los asistentes para que lleven sus banderas o logos a pesar de que en un primer momento se habló de que no ondeara ninguna para evitar susceptibilidades. Otras formaciones como Esquerra Republicana del País Valencià (ERPV), rosoberanistas, anunciaron que se manifestarían por la financiación pero con sus propios lemas y banderas.

La manifestación, que partirá de la explanada del Museo de la Ilustración de Valencia, acabará unos dos kilómetros de recorrido después en las Torres de Serranos, donde representantes de los diferentes colectivos presentes leerán fragmentos del texto reivindicativo. Los organizadores esperan una asistencia multitudinaria.