Empuje al Museo de Lleida

El caso Sijena que enfrenta a Cataluña y Aragón por bienes culturales del monasterio de esta localidad oscense conservados en museos de Barcelona y Lleida, ya tiene sus primeros efectos colaterales, aunque, en principio, son positivos. El consejero de Cultura Santi Vila presentó ayer una serie de medidas encaminadas a impulsar el arte y el patrimonio en varios centros de Lleida particularmente el museo que expone y conserva 44 de las piezas que están en litigio y que la juez ha exigido a la Generalitat devolver. “Son unas medidas en las que se ha trabajado desde antes del verano, y nacen tras la percepción de cierto desinterés desde esta demarcación. El plan de choque lo ha dirigido personalmente Jusèp Boya, director general de Archivos y Museos”, explican desde Cultura para dejar claro que no es una medida improvisada.

Vila anunció que el museo aumentará su colección con nuevas adquisiciones como las 24 piezas de cerámica leridana del siglo XVII (90.000 euros) que se acaba de comprar; o el depósito que realizará el MNAC de seis piezas, todas leridanas. Entre ellas, destaca el calvario de Tragó, una pieza románica del siglo XII y, sobre todo, cinco tablas del retablo de San Joan Baptista de Lleida, obra de Pere García de Benavarre y su taller. “Son piezas fundamentales en su trayectoria, permitirán doblar la presencia de este pintor en las salas del museo. Además, pertenecen a una obra de Lleida que llevaba 300 años fuera. Es muy buena noticia”, explicó Albert Velasco, conservador del Museo de Lleida y gran especialista en este pintor. El MNAC sigue conservando y exponiendo una sexta tabla de este retablo, que representa un Banquete de Herodes. El consejero explicó que pronto se sumarán otras obras del MNAC al depósito.

A nadie se le escapa que estas piezas pueden acabar sustituyendo en el discurso del museo a las que se exponen de Sijena, algo que desde Cultura intentan no vincular. “Es injusto que quedemos atrapados en un conflicto judicial concreto vinculado en definitiva a si una operación de compraventa se ajustó a derecho o no. Seríamos muy injustos con este museo si creyéramos que solo se explica con las piezas vinculadas a Sijena”, explicó el consejero que ha reiterado que las 44 piezas no se moverán de Lleida “hasta que no se resuelva de forma firma el asunto”.

Otra de las medidas adoptadas para potenciar este centro es su inclusión como Museo de Interés Nacional, una figura por debajo de la de Museo Nacional y que por “la importancia y el valor del conjunto de bienes culturales que reúnen, por las características generales o porque el interés de su patrimonio museístico traspasa sus muros”. Tienen esta consideración seis centros hasta ahora: la fundación Miró, el Macba, el Museo Episcopal de Vic, el Museo Marítimo, el de Montserrat y el Museo Picasso de Barcelona. Fuentes de Cultura explican que se está trabajando por incluir en esta lista también el Museo de Arte de Girona.

Cultura también ayudará en la viabilidad económica del centro. Vila anunció que se aportará “como una contribución extraordinaria e inmediata” de 217.650 euros para cubrir el déficit del centro y para el año próximo se aumentará la aportación de la Generalitat en 143.300 euros (pasando a ser un total de 485.000). El centro cuenta actualmente con un presupuesto de casi un millón de euros y en el trabajan 11 personas.

Vila también ha anunciado medidas a favor del Museo Morera de Lleida (comprometiéndose en la financiación de la nueva sede del museo), a la catedral de la Seu Vella (promocionando su candidatura como Patrimonio de la Humanidad y ayudando a su restauración aportando hasta 2018 más de 1,7 millones de euros), al centro de arte de La Panera, además de otras actuaciones en el patrimonio mueble e inmueble.