La mujeres del audiovisual valenciano reclaman mayor presencia

A pesar de ser algo más del 50% de la población, la presencia de la mujer en los puestos de decisión en cualquier ámbito es nula o minoritaria. En el audiovisual las cifras claman al cielo, tan solo el 8 % de las películas que se producen tienen a una mujer en la dirección, que sube hasta el 15% en guión y un poco más en producción; el mismo porcentaje se repite en las televisiones y productoras. Además, las diferencias se dan también en los contenidos, en las películas y series de ficción la presencia de personajes principales femeninos es de un 20%, frente al 80% de papeles para hombres.

En el año 2006 un grupo de cineastas veteranas, Coixet, Gutierrez, Bollaín entre otras, crearon la Asociación de Mujeres Cineastas y de Medios Audiovisuales (CIMA) con el objetivo de acabar con esta tendencia. En julio del pasado año se pone en marcha la delegación de Valencia, encabezada por Rosana Pastor. “Al principio fueron cineastas, pero en estos momentos CIMA, que tiene algo más de trescientas asociadas, reúne profesionales de todos los sectores, montadoras, técnicas, actrices, guion”, explica Rosana Pastor. “Por una parte hay que dar más visibilidad al trabajo de las mujeres, impulsar medidas que favorezcan la presencia de la mujer en puestos de trabajo de relevancia, donde se toman las decisiones importantes. Pero también hay una labor de cara al colectivo, generar confianzas entre nosotras, saber que podemos y debemos desarrollar nuestros propios proyectos. Aunando el esfuerzo de todas es más fácil”, comenta.

En el año 2007, la Ley de Igualdad en su artículo 26, establece las bases para el desarrollo de medidas de fomento de la igualdad en el audiovisual, pero en la práctica estas medidas tardan en implementarse. “No es un trabajo en contra de nadie”, afirma Rosana Pastor, “no se trata de dividir el mundo entro hombres y mujeres, sino compartirlo, se trata de cumplir la ley, nada más. Nuestra valía es un hecho, ahí están los datos, y sin embargo no se nos reconoce”.

La baja presencia de la mujer en puestos de responsabilidad todavía llama más la atención cuando se contrasta con los datos de formación. Hace ya años que la presencia de la mujer en la universidad supera a la del hombre en gran parte de las carreras. Lo mismo sucede en el audiovisual donde en algunas autonomías, como la andaluza, la presencia de mujeres en esta carrera supera el 60%, sin embargo, cuando los alumnos se trasladan al ámbito laboral esta proporción no se ve reflejada. “Nos legitima nuestra preparación y sin embargo tenemos que demostrar mucho más que los hombres. No sólo no estamos en puestos relevantes, tampoco tenemos casi presencia en jurados y recibimos muchas menos ayudas a proyectos. Cualquier cosa nos cuesta mucho más, conseguir financiación es muy difícil y cuando hay, siempre es más baja” se lamenta Rosana Pastor. “La consecuencia más grave es que hay mucho talento que se desperdicia, muchos buenos proyectos que se quedan por el camino”.

En el último Festival de cine de Sarajevo, el pasado mes de agosto, se impartió la conferencia “Mujeres en la industria cinematográfica actual: cuestiones de género. ¿Podemos mejorar?”. Tras la conferencia se redactó una declaración con medidas para facilitar la igualdad de género en la industria audiovisual europea. Asimismo en Cannes habrá un galardón específico para las mujeres, a partir de 2016 el festival contará con el premio “Women in motion”. “También en Valencia hemos implantado una medida similar”, añade Pastor, “este año en Cinema Jove se ha otorgado por primera vez el premio Cima, específicamente para películas dirigidas por mujeres. Este tipo de acciones posibilita que se vea el trabajo de las mujeres, por eso son necesarios”

En estos momentos de cambios políticos y sociales la asociación se siente esperanzada. Cima Valencia está integrada en la mesa de negociación del audiovisual como una asociación más, trabajando por el audiovisual pero también para demandar una mayor presencia de la mujer. ”Cima es una interlocutora válida en todas las negociaciones relacionadas con el audiovisual” dice Pastor, “algo se está moviendo, son pequeños logros, pero sabemos que nuestra empresa es larga. No es un trabajo fácil, pero hay que encontrar el modo de resolver esta desigualdad, tenemos que apelar al sentido común y a la confianza. No nos queda otra que seguir luchando por un espacio que es nuestro”, agrega la directora.