El fiscal indaga la contratación a dedo de Marta Pujol en un ayuntamiento

La justicia ha empezado a poner la lupa sobre los negocios de los hijos de Jordi Pujol con la Administración pública. La fiscalía ha decidido investigar la contratación de Marta Pujol como arquitecta municipal en Sant Vicenç de Montalt (Maresme) sin haber accedido a esa plaza mediante concurso público. Esa circunstancia salió a la luz la semana pasada, durante la comparecencia de la segunda de los siete hijos del expresidente catalán en la comisión de investigación del Parlament sobre el fraude.

El principal partido de la oposición de Sant Vicenç (6.000 habitantes) presentó una denuncia cuando el Consistorio empezó a redactar las bases de un proceso de selección para el puesto que ahora ocupa Marta Pujol. La fiscalía indagará en qué condiciones ejerce su trabajo la hija del expresidente, y si existe un contrato que la ampare. La denuncia relata que Marta Pujol —imputada por blanqueo y fraude fiscal en la causa que investiga el origen de la fortuna familiar— firmó un contrato a mediados de los noventa con un sueldo mensual de más de 2.200 euros. El acuerdo expiró en 2004, pero ha seguido trabajando allí todo este tiempo.

La hija de Pujol explicó, en su comparecencia, que Sant Vicenç la “fue a buscar” a otro Consistorio donde ya trabajaba como arquitecta. Admitió que ha trabajado sin que se convocara la plaza, “como un servicio de consultoría externa”, una práctica “habitual” en muchos pequeños municipios.

Una juez de Andorra, por otra parte, ha paralizado, de forma cautelar, el envío a España de información bancaria sobre Jordi Pujol Ferrusola, primogénito del expresidente. La magistrada había acordado el bloqueo de las cuentas de Júnior en caso de encontrarlas, pero ha suspendido el envío de los datos a la Audiencia Nacional hasta que una instancia superior resuelva el recurso presentado por la defensa.