La Xunta admite que no halla remedio a la mortandad masiva de berberecho

El berberecho de la ría de Arousa se muere. Lleva haciéndolo de forma masiva desde 2012 a un ritmo de vértigo que la Xunta atribuye a un parásito microscópico del género marteilia que se ceba exclusivamente en la variedad común del molusco. Un estudio del Centro de Investigacións Mariñas (Cima) señaló en 2013 al presunto culpable, pero un año después los científicos aún no saben cómo se transmite, según señaló ayer en la comisión de Pesca del Parlamento la directora general de Desenvolvemento Pesqueiro, Susana Rodríguez, que planteó como futura solución, a tres años vista, el cultivo de variedades resistentes. En el sector se desesperan ante una nueva campaña desastrosa y desconfían de que el parásito sea la única causa de la mortandad.

 La comisión parlamentaria trató la cuestión a instancias del PSdeG, cuyo diputado José Ramón Val recordó que una cofradía como la de Carril pasó de recoger 442.00 kilos de la variedad en 2011 a 100.000 el año pasado. Rodríguez contestó que el último estudio publicado apunta a un desconocido vector del contagio y apuntó que algunos datos sugieren que las fuertes lluvias invernales de los últimos años agravaron el problema. “En algunos bancos hay una muy elevada infección, pero menos mortalidad que en otros, lo que sugiere que la virulencia depende de condiciones ambientales”. Insistió en que, de todas formas, hay que seguir estudiando a través de proyectos de investigación “que se presentarán previsiblemente en la próxima convocatoria del programa estatal [de Fomento de la Investigación Científica y Técnica de Excelencia]”. Mientras tanto, toca esperar “a que desaparezca la enfermedad o a que el berberecho desarrolle mecanismos que puedan luchar contra ella”. La directora dijo que se han dedicado 82.000 euros a una “acción de investigación” del Cima para acelerar ese proceso natural mediante la selección de estirpes resistentes en el plazo de tres años.

La plaga afecta señaladamente al banco de Os Lombos do Ulla, que de hábitat especialmente prolífico ha pasado a convertirse en cementerio de berberechos. “La situación es caótica, desastrosa”, asegura el patrón mayor de la cofradía de pescadores de Carril, José Luis Villanueva, que señala que en esta campaña en Os Lombos no hay “ni un berberecho”. Está convencido de que el nocivo protozoo no puede ser la única causa de la desaparición de la especie. “No nos creemos nada; si la causa fuese la marteilia castigaría igualmente a las demás rías”, dice, y protesta porque “no es de recibo que estemos en el tercer año y aún no se haya hecho nada”. También apunta a otras posibles causas que afectan particularmente a la ría de Arousa. “Somos profanos, pero sabemos que los embalses aumentan los cauces en las desembocaduras y traen lodos y fangos, sabemos que en la agricultura se usan pesticidas… No desconfío de los técnicos de la Administración, ¿pero es que no trabajan?”, critica.

El PSdeG planteaba en el parlamento que se aprueben ayudas para socorrer al sector. La directora general adujo que aún es pronto. “Parece lógico que una vez que se inicia una campaña se dé un tiempo prudencial para examinar cómo se desarrolla. Una vez que tengamos los datos completos habrá que reunirse con el sector”, justificó Rodríguez, quien indicó que solo entonces se planteará la posibilidad de que los afectados puedan acogerse a un cese de actividad por fuerza mayor que les permita cobrar el paro, o bien recibir un permiso especial para dedicarse a otras artes. Una medida similar se aprobó a principios de 2013, con 679 solicitudes de cese de las que se aceptaron el 70%. “Nunca antes hemos tenido esta sensación de desprotección”, opone Villanueva.